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Un parque con siete vidas

Port Aventura se prepara para recibir a tres millones de turistas

Primero tenía que haber sido el parque Busch. Luego se transformó en Tibigardens. Ahora se llama Port Aventura. El parque temático de Tarragona, rodeado de polémicas políticas en su primer proyecto y de sospechas sobre su viabilidad en el segunda, está ahora, precisamente cuando más alto ha llegado el listón de los escándalos externos, prácticamente a punto de ser inaugurado.

Aunque nadie se ha acostumbrado, todavía a su nueva denominación, más del 90% de Port Aventura está construido cuando apenas faltan cinco meses para su inauguración. El escándalo político desatado por la detención y encarcelamiento del financiero Javier de la Rosa y la utilización indebida de parte del aval de 10.000 millones de pesetas aprobado por el Parlamento de Cataluña para financiar su construcción, contrastan con el nivel de acabado de la primera fase del proyecto.

Port Aventura acogerá a los primeros turistas en abril del año, próximo. Se trata del segundo, parque temático más grande de Europa, sólo superado por el construido Por Disney en las afueras de París. Frente a las dificultades que atraviesa Eurodisney, Port Aventura esgrime la modestia como su mejor arma. A., pesar de que las comarcas de Tarragona gozan de un clima mucho, más seco, soleado y templado que París, Port Aventura sólo abrirá en temporada alta: entre abril y octubre.

La facturación anual, según afirma el director del parque, Luis Rullán, ascenderá a 15.000 o 20.000 millones de pesetas. Durante los últimos dos meses, la compañía encargada de su puesta en marcha ya ha empezado a realizar la selección de personal, En poco más de una semana los; promotores del parque recibieron más de 20.000 solicitudes para cubrir, las 2.000 plazas. En. esta, selección, los vecinos de los; municipios más próximos al parque han tenido facilidades para ser aceptados para ocupar los, puestos que se ofrecían. Sus actuales dueños -La Caixa, la británica Pearson, la norteamericana Anheuser Busch y la compañía eléctrica Fecsaestiman que en el primer año de actividad pasarán por taquilla 2.650.000 personas. Un total de 1,2 millones de visitantes procederán del extranjero -básicamente del Reino Unido, Alemania, Francia, Holanda e Italia, los grandes clientes del turismo de sol y playa- Se estima que otro medio millón serán turistas españoles, y el resto provendrán del área de influencia del parque: Cataluña, la Comunidad Valenciana y Aragón.

La entrada por pasar un día en el parque costará 3.800 pesetas, y la de los niños 3.000. Quienes prefieran un abono de temporada lo podrán adquirir por 9.500 pesetas (4.200 pesetas si son menores de 12 años).

A cambio, el turista se encontrará con mucho más que un inmenso parque de atracciones. Port Aventura ha sido estructurado en cinco parques temáticos, en los que se recrean la vida, la arquitectura y las costumbres de México, China, el Lejano Oeste, la Polinesia y los países mediterráneos; esas áreas podrán ser recorridas a pie, en tren o en barco, y habrá un tema central: Mapamundi. Además, el parque contará con 30 atracciones y 11 espectáculos, desde el rafting por aguas bravas a recorridos en lancha por aguas turbulentas, la mayor montaña rusa de Europa, un teatro chino milenario, etcétera. Un visitante medio que no vaya ni lento ni rápido necesitará al menos tres días para realizar un recorrido exhaustivo por las instalaciones. Cada parque dispondrá de espectáculos y de atracciones.

La construcción de Port Aventura ha supuesto unas inversiones de 52.000 millones de pesetas en esta primera fase, que se ampliarán a 100.000 en la segunda. En sus instalaciones trabajarán de forma directa unas 2.000 personas. Los efectos sobre el empleo indirecto en el conjunto del sector turístico de la zona no se han evaluado con precisión, pero se estiman en varios miles de puestos de trabajo. En esta primera fase el negocio se ha centrado en el reclamo de visitantes.

Los nuevos promotores del parque han aprendido la lección. de Eurodisney. La crisis que ha atravesado el mercado inmobiliario en los últimos años ha aconsejado dejar para mejores tiempos lo que al principio pensaron sus promotores que sería el gran negocio: la construcción de un complejo de apartamentos y hoteles.

Un parto difícil

La gestación del parque ha sido larga y difícil. Primero se pensaba en inaugurarlo antes de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Pero poco después una sentencia del Tribunal Supremo a favor de la segregación del municipio tarraconense de Villa-Seca Salou, en el que debía ubicarse el gigantesco parque, retrasó el proyecto y la compañía norteamericana Anheuser Busch abandonó su papel de líder.La salvación llegó de la mano del antiguo ángel de la guarda de los intereses del grupo KIO en España, Javier de la Rosa, avalado con 10.000 millones de pesetas por la Generalitat. Pero las dificultades financieras de De la Rosa volvieron a poner el proyecto en cuestión. Tras largas negociaciones, tomaron la mayoría la Caixa -que entró a regañadientes y para no desairar a la Generalitat de Cataluña-, el grupo británico Pearson y la compañía Fecsa.

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