Schumacher, pendiente de Hill para ganar el Mundial en Japón

Michael Schumacher (Benetton Ford) puede convertirse en el nuevo campeón mundial de fórmula 1 la próxima madrugada en el circuito de Suzuka, donde se disputa el Gran Premio de Japón, penúltima prueba del campeonato. Para inscribir el nombre de un piloto alemán en el palmarés de ganadores por vez primera en la historia, Schumacher tiene que ganar y esperar que su único rival por el título, el británico Damon Hill (Williams Renault), no sea segundo; o bien acabar en el segundo puesto y que Hill no se clasifique entre los cinco primeros.

Schumacher, a pesar de dos descalificaciones en Inglaterra y Bélgica y de haber estado suspendido durante los grandes premios de Italia y Portugal, conserva cinco puntos de ventaja sobre Hill y se ha impuesto en ocho grandes premios, tres más que el británico.La primera sesión de entrenamiento dejó en evidencia el firme propósito de Schumacher de decidir el campeonato sin necesidad de esperar a la última carrera, la próxima semana en el autódromo, australiano de Adelaida. Sobre un circuito que teóricamente, no favorece a su Benetton, equipado con un motor menos potente que el Williams de Hill, el líder del campeonato dominó la primera sesión oficial de entrenamientos en la que superó a su rival en 487 milésimas. De hecho, Hill tuvo que emplearse muy a fondo para conseguir el segundo puesto por delante del también alemán Heinz Harald Frentzen (Sauber Mercedes).

Schumacher tan sólo necesitó completar siete vueltas para hacerse con el mejor tiempo. Pudo limitar su esfuerzo al máximo y únicamente utilizó un juego de neumáticos. Su coche demostró una estabilidad superior en las selectas curvas del trazado japonés.

"Estoy satisfecho por completo", indicó Schumacher, "el coche estaba a punto prácticamente desde la primera vuelta. No se podía soñar nada mejor para empezar un fin de semana donde existirá mucha presión. Digamos que ahora esta presión empieza a recaer sobre otro".

Mucha igualdad

La igualdad fue la nota dominante ya que entre los nueve primeros clasificados existió menos de un segundo de diferencia. Frentzen, que probablemente sea piloto de McLaren la próxima temporada, protagonizó la pequeña sorpresa al superar al británico Nigel Mansell (Williams Renault) en la lucha por el tercer puesto. Frentzen, que disputó las dos últimas temporadas el campeonato de fórmula 3.000 en Japón, demostró un perfecto conocimiento del circuito.La lucha por la victoria debería circunscribirse a los dos candidatos al título a menos que Mansell, compañero de Hill, se mezcle en la batalla. También el británico Johnny Herbert, debutante en Benetton Ford este año tras haber militado en Lotus y Ligier, puede tener algo que decir de confirmar en la carrera la rapidez que demostró en los primeros entrenamientos, que concluyó en quinta posición. Mansell demostró ayer cierto nerviosismo y exigió a su escudería que le permitiera estar lo más solo posible en el box durante los primeros entrenamientos. También pidió que se prohibiera el acceso al taller de Williams del joven escocés David Coulthard, al que sustituye en la escudería desde el Gran Premio de Europa disputado en Jerez.

Sobre un circuito que premia la potencia de los motores, la decepción la protagonizaron los Ferrari, pilotados por el francés Jean Alesi y por el austriaco Gerhard Berger, séptimo y decimoprimero.