"Los agobios de la Ciudad se remedian con una vela de miel"

Leonor Alazraki, aspecto jovial, mirada intensa y palabra suave, habla con convicción. Nació en Argentina, de ascendencia española. Estudió Derecho, primero, y trabajó en mercadotecnia después, hasta que descubrió su verdadera vocación; puso manos a la obra y se zambulló en la lectura de la cábala y de tratados de alquimia. Llegó a Madrid en 1975 y aquí se quedó. Ha instalado una librería esotérica en el centro de la ciudad e imparte cursos en los que explica los secretos de la actividad a la que se dedica desde hace 25 años: el tarot.Pregunta. ¿En qué consiste el tarot?

Respuesta. Se trata de proporcionar a la persona que quiere consultarlo una orientación sobre su devenir y su futuro en cuanto concierne al trabajo, el amor o la salud.

P. ¿Cómo se desarrolla?

R. Intervienen siempre tres sujetos: el consultante, que pide que le echen las cartas; la persona que las echa, en este caso, yo, y el propio tarot (un mazo de 78 cartas con 22 arcanos -secretos -), en el que aparecen arquetipos y elementos. A cada uno de ellos corresponde un número y una letra.

P. ¿Qué significan los arquetipos?

R. Son rasgos, tendencias y conductas que se encuentran dentro de nosotros. Para mí, cuando echo las cartas a alguna persona, dejo de ser yo misma. Entonces hablo por ella, y es ella, a través de mí, la que define su identidad y su futuro por medio de las cartas que van saliendo.

P. ¿Cabe modificar el futuro?

R. Podemos cambiarlo, pero hay que esforzarse. Existen límites derivados de las condiciones sociales o económicas en que nos movemos, pero es posible modificarlo.

P. ¿Las predicciones del tarot son exactas?

R. En manos de un buen profesional, sí lo son.

P. ¿Se considera una buena profesional?

R. No quiero parecer arrogante, pero creo que sí lo soy.

P. ¿Cómo lo sabe?

R. Porque muchas personas a las que les eché las cartas regresan a mí, ya que el futuro que vimos juntos se cumplió.

P. Cuando descubre algún presagio negativo, ¿qué hace?

R. Lo paso muy mal.

P. ¿Qué augurios le gusta anunciar?

R. La llegada de un hijo deseado, una boda entre gente que se ama...

P. ¿Cómo son los madrileños ante el tarot?

R. Las cartas [que extrae ante el periodista] dicen que el madrileño típico podría ser aquel que saca el Mago, las Estrellas y la Rueda de la Fortuna. Eso significa que aprende de la experiencia, es empírico; es también ilusionado, capaz de mantener la esperanza y el ideal; además, su suerte da vueltas y su fortuna es cambiante, como la rueda. Hoy puede ser un gigante y mañana un ratoncito.

P. ¿Madrid es mágica?

R. Si, totalmente.

P. ¿Dónde lo es más?

R. En el Retiro, en Lavapiés, en la Gran Vía. Pero, sobre todo, en el corazón de sus gentes.

P. ¿Qué aconseja a los madrileños y madrileñas para remediar las depresiones y agobios del fragor de la ciudad?

R. Les sugiero que pongan en su casa una vela de miel. Así podrán identificar la naturaleza de sus problemas para, luego, combatirlos con éxito.

Librería Esotérica. Hierbas, objetos mágicos. Pelayo, 5. Teléfono 522 72 75.