La ausencia de Romario rompe al Barça

Los partidos disputados por el Barcelona en la pretemporada sólo han servido para abrir interrogantes. Johan Cruyff tiene ahora escasos días para cerrarlos. Habrá que tener en cuenta que se trata de una pretemporada atípica. Cruyff organizó su stage holandés sabiendo que marcando los habituales 14 goles al Buitenpost de turno en campos de primera regional no iba a motivar a sus mundialistas. Por eso desvió la ruta hacia rivales de importancia. El balance no es desolador aunque los datos son inquietantes. El técnico azulgrana todavía no ha resuelto la dependencia del equipo del rebelde Romario.El brasileño confirmó ayer, según informa Ricardo Socca, su intención de volver a España el próximo fin de semana pero advirtió que no aceptará permanecer en el banquillo del Barcelona como castigo por haber prolongado sus vacaciones. "No sé cuál será mi sanción ni estoy preocupado por eso ahora. Me parece justo que me multen y será normal que quede como suplente hasta recuperar la forma física, pero no aceptaré quedarme en el banco de reserva como castigo. Eso no", aseguró.

Los interrogantes en el Barcelona este año empiezan en la portería -Cruyff dice que no busca otro portero-, donde Busquets y Lopetegui se esfuerzan para convencer al aficionado de que la marcha de Zubizarreta no significa una bajada del listón. Delante de ellos, Abelardo ha demostrado en un tiempo récord que es una gran adquisición. Pero las mayores dudas se centran en calcular la dependencia de Romario.

La incertidumbre sobre la presencia, la forma física y la actitud del brasileño convierte en obligatoria la búsqueda de alternativas. Y la composición del bloque o el valor de los nuevos fichajes están íntimamente relacionados con el futuro de Romario.

El fenómeno no es ni nuevo ni inesperado. Por mucho que Johan Cruyff hablara de "una opción más", se señaló hace un año la llegada del brasileño como una seria modificación del modus operandi del entonces tricampeón. Ya se había hecho rebelde e imprescindible en el PSV. Después de dos años de marginación, logró hacer lo mismo en apenas ocho partidos con la selección brasileña. Parreira le fabricó un marco idóneo basado en un centro del campo tan denso y trabajador que ni siquiera hubo cabida para la inspiración de Raí.

Cruyff ha insistido en que el Barcelona fue capaz de ganar tres Ligas sin Romario, pero su ausencia abre más interrogantes. En las tres temporadas anteriores a su llegada los goleadores del Barça fueron: Stoichkov (14, 17 y 20), Bakero (13, 11 y 9), Laudrup (7, 13 y 10), Begiristain (6, 6 y 15) y Koeman (6, 16 y 11, todos a balón parado). Es decir, que el regreso a un futuro sin Romario se apoya en los veteranos, que difícilmente jugarán 60 partidos al año.

Los fichajes, mientras tanto, han sido ideados para reforzar la mentalidad obrera del equipo. La gran excepción es Gica Hagi, un jugador que mezcla genialidades con faltas de concentración y que está acostumbrado a tener sus alegrías cubiertas por una defensa mucho más densa que la del Barcelona. La incógnita es su aportación goleadora dado que repartió tan sólo 20 goles entre sus tres temporadas en las primeras divisiones española e italiana con el Madrid y el Brescia.