Myers se rompió en la semifinal

Sandra Myers no estará en la que iba a ser su cuarta gran final individual de 400 metros, para la que había anunciado una medalla. La oportunidad era única y postrera. A sus 33 años, con la regresión lógica de la edad, aún disponía de potencia suficiente como para figurar en la élite del continente. Ayer, en la semifinal, se rompió. Sus músculos dijeron basta cuando se contraían de manera explosiva para seguir la estela de las más rápidas.A los 200 metros el músculo isquiotibial, ese que ha mantenido inactivo al marchador Plaza durante tres semanas antes de los campeonatos, sufrió una tremenda distensión. Lo probable es que se rompiera. Sandra, en plena curva, casi al máximo de revoluciones para que Perec y Andreyeva no se distanciaran en exceso, se detuvo de repente. Un agudo dolor y la pierna derecha se le quedó sin fuerza. No tuvo ni siquiera tiempo para ver cómo otras atletas peor que ella se marchaban camino de la final.