Chaves afronta su investidura con el PSOE andaluz en crisis y el pacto PP-IU en contra

El presidente en funciones de la Junta de Andalucía, el socialista Manuel Chaves, tiene ante sí una carrera de obstáculos para conseguir su investidura antes de agosto. Por un lado, los guerristas han reabierto la crisis interna, hasta el punto de votar en contra de la dirección del grupo parlamentario. Por otro, los acuerdos entre el PP e IU le tienen maniatado en la Cámara regional. Además, ha de formar gobierno aún sin saber si será investido en las próximas semanas.El nuevo presidente del Parlamento, Diego Valderas, se entrevistará hoy con los líderes de las fuerzas parlamentarias para acordar la fecha de la primera sesión de investidura. Según los responsables de IU, el consenso parlamentario con el PP para evitar que los socialistas acapararan los cargos como si contaran con la mayoría absoluta no impide el entendimiento programático con el PSOE. IU-Los Verdes se abstendrá en la tercera votación de la investidura para que Chaves sea presidente antes de agotar los plazos. Por eso, Valderas quiere empezar esta semana o a principios de la próxima con las, sesiones de investidura.

Chaves está mucho más preocupado con la situación interna del PSOE. Los guerristas se niegan a acceder a los órganos de partido, instituciones y Gobierno si el secretario regional, que es también Chaves, no hace una oferta global de integración. El comité director ha sido adelantado al miércoles por la presión guerrista y es el foro en el que se dilucidará la orientación del nuevo Gobierno regional.

Respecto a los futuros consejeros, se da por sentada la marcha de Jaime Montaner, el más veterano en la Junta, y Carmen Hermosín.