La crisis francesa, cuestión médica
El ciclismo francés es el que más victorias de etapa suma en la historia del Tour, 629 (445 Bélgica, 205 Italia, 144 Holanda y 81 España), pero hace tiempo que detuvo su cuenta. El afilo pasado, sólo una, de Pascal Lino; en éste, ninguna, mientras italianos y españoles, que son sus principales rivales, llevan dos y una, respectivamente.De las Cuevas, gregario de Induráin hasta el año pasado, es el candidato francés a ser la alternativa en caso de que el duelo entre los dos favoritos conduzca al caos. Mientras, otros corredores buscan insistentemente triunfos de etapa, que no logran conseguir. Magnien (Castorama) lo ha intentado dos veces, pero en una de ellas Cabello le dejó atrás después de haber rodado juntos 180 kilómetros; Simon (Castorama) se asoma a los sprints, pero con pocas opciones. En la escapada del viernes, ningún corredor francés logró un hueco.Esta crisis no hace peligrar el completo dominio del ciclismo del país organizador en la historia del Tour (36 victorias por 18 de Bélgica, 8 de Italia y 6 de España), pero hace nueve años que no lo gana y apenas sube al podio en los finales de etapa. Cyrille Guimard, director del Castorama, aporta una versión al problema: "Los equipos franceses no tenemos más que un médico mientras que los italianos, hasta cuatro. El avance del deporte italiano, y no sólo específicamente del ciclismo, se debe por completo a la biología".
Guimard no dice por qué los conjuntos franceses, más poderosos económicamente que los italianos, no amplían su cuadro médico. Porque los italianos no se esconden cuando hablan de su preparación y reconocen que sí, que el médico cuenta, pero también el duro trabajo invernal. Y su lema: "sólo el trabajo trae recompensas".
Del ciclismo español no opina el carismático director técnico francés pero sí de Mguel Induráin: "El español no está al nivel de los más grandes de la historia del Tour. Induráin, para mí, es de la talla de un Gimondi. Es el mejor del Tour, pero creo que Rominger es mejor. Éste ya habría ganado el año pasado si no hubiera penalizado en la contrarreloj por equipos, que corrió con sólo seis compañeros, lo que le hizo afrontar la individual cuando descargaba una espléndida tromba de granizo".
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