El Banco Internacional de Pagos achaca el alto nivel de paro a la rigidez salarial en Europa
El Banco Internacional de Pagos (Bank for International Settlements, BIS) se sumó ayer al coro de organizaciones internacionales que piden una mayor flexibilidad la boral para combatir el desorbitado desempleo en Europa. En su informe anual, el banco central de los bancos centrales atribuye el crecimiento del paro a las normativas laborales europeas, que impiden que los salarios se ajusten a los cambios del mercado de trabajo. Los sindicatos también se llevan su parte. El BIS considera que la elevada afiliación sindical en algunos países explica en parte el alto paro.
Este ataque directo al movimiento sindical europeo refleja perfectamente el tono de mayor dureza que ha adoptado el BIS en su último informe anual. Se trata del primero realizado bajo la batuta del británico Andrew Crockett, director general de esta institución, que reúne a más de 30 bancos centrales de todo el mundo. Crockett sustituye al belga Alexandre Lamfalussy, que abandonó el BIS para hacerse cargo del Instituto Monetario Europeo, el futuro banco central europeo.Crockett, anterior director del Banco de Inglaterra, comienza por ajustar cuentas con los sindicatos ingleses, machacados en la década pasada por la ex primera ministra Margaret Thatcher. "La caída de la afiliación sindical en EE UU y el Reino Unido puede ser en parte la causa de la menor persistencia del desempleo en estos países", asegura el informe.
El Banco de Pagos basa su razonamiento en que el enorme número de parados de larga duración en Europa, especialmente entre trabajadores con escasa cualificación, se puede relacionar "sin ningún tipo de dudas" con unos salarios inflexibles frente a la menor demanda de mano de obra sin formación. Es decir, que los salarios siguen subiendo a pesar de la masa creciente de desempleados. A los ojos del BIS, los sindicatos, al defender los salarios, son responsables del aumento del paro.
El Reino Unido es, por tanto, un ejemplo a seguir para los países que deseen combatir el paro de larga duración, según el BIS. "Una elevada afiliación sindical puede ser una de las explicaciones para el persistente y elevado nivel de desempleo en algunos países escandinavos y en Alernania", dice el informe.El paro en España, sin embargo, se atribuye a las rigideces del mercado de trabajo. "Les despidos son particularmente costosos y complicados en España, lo que ha contribuido a la deficiente creación de empleo a largo plazo", asegura el informe, que se imprimió antes del 26 de mayo. Esto puede explicar que no se aluda a la reforma laboral del Gobierno, que entró en vigor precisamente ayer.
Al contrario que en los informes anteriores, el BIS realiza propuestas bien concretas en el texto distribuido ayer. Para flexibilizar salarios, propone que los incrementos de sueldos dejen de acoplarse automáticamente a la inflación. O por lo menos, que se negocien en función de la inflación prevista y no de la pasada.
La publicación del informe, un estudio muy respetado por la comunidad financiera internacional, coincide con la reunión que cada año celebran los gobernadores de los bancos centrales -entre ellos el español, Luis Ángel Rojo- en la sede del BIS en Basilea (Suiza). El informe asegura que el rápido crecimiento de los derivados financieros el año pasado y las cuantiosas pérdidas de algunos inversores muestran la necesidad de una vigilancia más estricta de este mercado.
El Banco de Pagos, un año más, recomienda también a los gobiernos occidentales que ajusten al máximo sus políticas fiscales, controlen sus déficit y la deuda pública si quieren contar con la aprobación de los mercados internacionales. Los países industrializados, añade el informe, deben crecer sin poner en peligro el control de la inflación conseguido en los últimos años.
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