"No sólo Guerra representa a la izquierda del PSOE"

Raimon Obiols espera que el congreso que el PSC celebró el mes pasado no haya dejado al socialismo catalán impedido para presentarse ante el PSOE como modelo de renovación sin traumas.Pregunta. ¿Es trasladable al PSOE el voto secreto e individual que estrenó el PSC?

Respuesta. Todo lo que signifique avanzar hacia una mayor pureza democrática es positivo. Aunque eso no supone que en todas y cada una de las votaciones el sufragio de los delegados deba ser individual y secreto.

P. A usted le disgusta la condescendencia de Narcís Serra con los renovadores más radicales. ¿Ha contribuido Serra a arruinar el propósito del PSC de erigirse en punto de referencia para una renovacion no excluyente del socialismo español?

R. Siempre he visto en Serra una clara voluntad de avanzar hacia la renovación por el diálogo, la confrontación sensata de puntos de vista, el reconocimiento de la pluralidad, la integración y el acuerdo más amplio posible.

P. Pero la discrepancia entre usted y Serra sobre cómo abordar la pugna interna en el PSOE fue uno de los factores de la explosión del congreso del PSC...

R. Serra ha dicho en alguna ocasión algo que yo comparto al cien por cien: en el PSOE no sobra nadie, sino que falta gente.

P. Defina a renovadores, integradores y guerristas.

R. El PSOE funcionó durante muchos años con un gran centro, una pequeña ala izquierda poco influyente y una pequeña ala derecha un poco más influyente. Ahora camina hacia el modelo socialdemócrata europeo: un sector moderado y otro más a la izquierda.

P. ¿Con los renovadores en el primero de esos sectores y los guerristas en el segundo?

R. Después del congreso desaparecerán las viejas etiquetas y surgirán otras nuevas. O no surgirá ninguna, lo cual sería mucho mejor. No se puede afirmar que un sector u otro representen a la izquierda o a la derecha del partido.

P. ¿Representa Alfonso Guerra a la izquierda del PSOE?

R. No sólo él. También entre los renovadores hay gente con actitudes propias del ala izquierda de la socialdemocracia.

P. Guerra distingue dos familias en el PSOE: socialistas y social liberales. ¿Asume usted esa clasificación?

R. Las clasificaciones simplificadoras pueden servir para entender algunas cosas, pero no todo. La evolución europea tiende a agregar en un mismo espacio a socialdemócratas y liberaldemócratas con políticas afines sobre la construcción de Europa, la modernización del sector público y la definición de un modelo social. Frente a esto están las derechas, la vieja y la nueva.

P. ¿Significa eso que la clasificación es incorrecta o que ambos sectores son compatibles?

R. No es contradictorio poner mucho énfasis en las libertades individuales y, al mismo tiempo, en la necesidad de una sociedad de personas iguales, que es el gran ideal del socialismo democrático. La clave del debate está en cómo debe reformarse el Estado de bienestar, cómo debe evolucionar el sistema redistributivo, hasta dónde debe desplazarse la frontera entre lo público y lo privado... Los sectores del PSOE, han de saber avanzar en esta discusión por el camino de la integración.

P. ¿Hay fractura ideológica en el PSOE o simples codazos?

R. Las diferencias van desde la reforma del Estado del bienestar hasta la organización del partido, pasando por las nuevas contradicciones de la sociedad, particularmente la medioambiental. Al mismo tiempo, es evidente que en todo colectivo humano los asuntos personales tienen gran importancia.

P. ¿Ejecutiva equilibrada u homogénea?

R. Uno de los ejes del congreso será ver cómo la nueva ejecutiva compagina la necesidad de homogeneidad con la de aglutinar el apoyo más amplio posible de los delegados.

P. La ponencia marco del congreso del PSOE, de la que usted es coautor, ha recibido un auténtico alud de enmiendas...

R. Eso puede significar que hay un exceso de crítica a la ponencia o bien que ésta tiene una enorme cualidad estimulante. Prefiero pensar lo segundo.