Yeltsin pide un Estado fuerte para que Rusia vuelva a ser superpotencia

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, defendió ayer, en una sesión conjunta de las dos cámaras del Parlamento, un Estado fuerte, democrático y federal, que permita a su país volver a ser una superpotencia. El día anterior, la Duma (Cámara baja) le había desafiado al amnistiar, por abrumadora mayoría, a los golpistas de 1991 y a los políticos y militares rebeldes que se atrincheraron, el pasado octubre, en la Casa Blanca.En la sala de mármol del Kremlin, donde se celebraban en tiempos de la Unión Soviética los plenos del comité central del partido comunista, Yeltsin invocó una política exterior más activa y dijo que la ampliación de la OTAN, si excluye a Rusia, abrirá la puerta a "nuevas amenazas para Europa y el mundo". Su país, añadió, "no es un invitado en Europa, sino un participante de pleno derecho".

Páginas 2 y 3