La estela de Antonio Martín

Pocas bicicletas rodaban ayer por la tarde por el asfalto de nuestra región. Nadie se atrevía a seguir la estela de Antonio Martín. El mundo del ciclismo estaba sobrecogido y vivía una trágica jornada de luto. La noticia de la muerte del corredor de Torrelaguna impactó sobre todo en el club José Rivas de Colmenar Viejo. Allí, el corredor de Banesto pasó tardes enteras cuando empezaba a rodarse. José Rivas, ciclista e hijo del director de la entidad, era uno de los más afectados: "La carretera donde ha ocurrido el percance no era demasiado peligrosa, pero...". El dolor le impedía seguir.Mientras, en la familia ciclista madrileña surgía de nuevo un interrogante. ¿Servirá este desgraciado percance para algo? Para Benito Fernández, vicepresidente del club ciclista más grande de la región, la Unión de Fuenlabrada, los hipotéticos efectos serán efímeros. "Seguramente va a haber unos días donde los conductores tendrán más cuidado, pero luego enseguida se olvidan las medidas de precaución de los automovilistas cuando ven a un ciclista". Paco Nieves, del club ciclista de Parla, espera que a partir de ahora los conductores levanten el pedal de forma instintitiva: "Sabernos que ir en bici es un peligro, ahora seguramente todos pensemos que al pasar a su lado nos ponemos en el borde del precipicio". Alfonso Parhil, del club ciclista de Móstoles, piensa que habría que cuidar mejor las orillas de las carreteras...

Para Eduardo Chozas, ex ciclista profesional, el riesgo forma parte de los entrenamientos. "El carril-bici está bien para los cicloturistas, pero nosotros tenemos que rodar y hacer muchos kilómetros sabiendo que hay que andar con mucho tacto". Roberto Torres, ciclista del Lotus, perdió hace mucho el miedo. "Si piensan en lo malo, lo mejor es no salir, espero que todo esto sirva para algo", concluyó.