"Haremos un programa sólo de humor"

Josema, 38 años, y Millán, 39, ya saben lo que es el éxito. De hecho, llevan años en la cumbre de una de las actividades más difíciles y agradecidas: hacer reír a un público. Tal vez por eso su desafío es mayor. Estar a la altura de lo que se espera de ellos sin repetirse hasta agotar un filón que también trabajan otros imitadores. Su nuevo programa en Televisión Española comenzará a emitirse en marzo. Están tan compenetrados que responden uno por otro en total sintonía. Josema, el más alto, ojos azules, tal ve el augusto de la pareja, sea más prudente, comedido, y Millán, más vehemente y rotundo. Como en escena.Pregunta. ¿Cómo va ser el regreso?

Respuesta. Es un programa sin artistas invitados de ningún tipo; será un espacio más breve, cerca de una hora; no habrá cantantes, ni invitados. Nosotros dos y un pequeño grupo de actores, siete u ocho en total, que nos ayudará en el rodaje de los sketches. El programa pretende ser un magazine en el que habrá modas, entrevistas, siempre en clave de humor y siempre hecho por nosotros.

P. ¿La parodia será la base del programa?

R. Por nuestro carácter inquieto, tal vez inquietante, por nuestra manera de hacer el humor, hemos dejado hace tiempo la imitación de tanto personaje popular y nos hemos abierto un poco hacia unos personajes inventados, hacia escenas de la vida cotidiana, nuevas situaciones.

P. ¿La televisión no acaba quemando, saturando al espectador?

R. Nos preocupa, pero no nos aterra, porque creemos en la calidad de Mártes y Trece, porque creemos que somos buenos en lo nuestro. Nunca digo los mejores, porque creo que no existe el número uno en nada. Hay buenos, regulares y malos.

P. ¿Los imitadores de los imitadores os perjudican?

R. No. No te dejan dormirte en los laureles. La competencia existe y creo que cada uno tiene su sitio. No nos interesa luchar contra uno para intentar quitarle el sitio o para ser el número uno, sino tener un sitio, un camino y caminar por ahí. Es lo único que nos preocupa como Martes y Trece.

P. ¿Cuál es vuestra mejor virtud?

R. Creo que somos unos actores diferentes. Nos aportamos, nos apoyamos y nos complementamos, y hemos evolucionado hacia ese tipo de comedia en la que Carol Burnett es una maestra.

P. ¿Qué les parecieron los programas de Nochevieja?

Josema. Hice un poco de zapping, pero muy poco. El resto de la noche estuve con la familia. Lo que está sucediendo es que la tarta, la audiencia, está más repartida, no está en poder de una sola cadena. Ahora hay una, TVE- 1, que está por delante pero a poco margen. Sobre los programas no puedo opinar porque no vi casi nada.

Millán. Yo no estaba en Madrid pero lo grabé. Se vio claro que no es tan fácil hacer el fin de año. Nosotros no quisimos repetir y preferimos que lo hicieran otros ' a ver qué tal.

P. ¿Tenéis mal recuerdo de vuestro último programa Viéndonos?

Josema. En absoluto. De 40 programas, 36 estuvieron en el número uno de audiencia de la semana. Seguramente, si un programa de 40 semanas alcanza ese nivel, le dan el Ondas. ¿Quién decide aquí el éxito? ¿La audiencia o e gusto de un señor? No discutimos que el programa tuviera fallos, pero estar los primeros 36 de 40 semanas es un dato.

Millán. Primero, nosotros nos asustamos ante el reto de 40 programas, cuando nunca habíamos hecho un programa semanal. Entonces nos dijimos: vamos a hacer un programa de variedadades conducido por nosotros. Ocurrió que a los cinco o seis primeros programas la gente esperaba vernos a nosotros, porque era a los que estaba acostumbrada. Mucha gente no lo vio más y pensó que siempre fue así y no se dio cuenta de la evolución que hubo en las 40 semanas. Al final era un programa de humor con alguna actuación. Y además nadie ha destacado que somos los únicos que no hemos aceptado meter publicidad interna dentro de los sketches, por lo que hemos perdido una pasta muy gansa muy buena. Y esto nadie lo dice.

P. ¿Os preocupa la contraprogramación?

R. Una cosa es la competencia y otra la contraprogramación. Estamos ya un pelín hartos. Nos parece perfecto que la competencia emita a la vez un programa de creatividad propia. Pero que estén esperando a ver cuándo ponen tu programa para coger el talonario y meter una película que vale millones... Entonces estás compitiendo con Hollywood, no con otro programa de producción propia.

P. ¿A qué aspiran profesionalmente?

R. A nosotros en nuestra carrera nos ha acompañado la suerte. Hacíamos programas muy puntuales, que funcionaban mucho y había sólo una televisión. Hacer un solo programa al año y si encima es bueno y la gente está expectante era un lujo. Luego hicimos dos especiales al. año que también funcionaron de maravilla y teníamos un éxito absoluto, récords de audiencia. Pero económicamente, no nos engañemos, esta profesión tiene un momento en el que pasa el tren, y si puedes cogerlo, por qué no te vas a montar si tu trabajo es honesto. Y entonces llegó la oferta de hacer un programa semanal. Y sabíamos que íbamos a ganar un dinero importante, pero sabíamos que podíamos correr el riesgo de quemarnos,, pero lo aceptamos. Hemos tenido suerte hasta ahora, hemos tenido momentos peores y mejores pero, en general, hemos tenido suerte. Nos ha ido bien y hasta en el cine, con dos películas no especialmente magníficas, ni fabulosas, pero de éxito. Tenían una gran dignidad, desde nuestro criterio, y han funcionado muy bien. Pero también creemos que no podemos hacer una tercera o cuarta película así, que debemos aspirar a más, a tener un guión más sólido, más importante. Tenemos ofertas, conversaciones, y podemos optar a un buen guionista como, por ejemplo,. Rafael Azcona. Pero de momento estamos muy contentos en televisión y no tenemos la capacidad que tienen otros de hacer dos cosas, o tres, al tiempo.

P. ¿Os afecta en algo la polémica que hay en tomo al cine español?

R. Estamos al margen, porque nuestra política es de mantenermos al margen de las polémicas políticas, económicas o sociales de cara al espectador. Otra cosa es que dentro de nuestros corazones tengamos nuestras ideas, sentimientos y preocupaciones. La industria del cine, la artesanía del cine, mejor dicho, nunca se ha preocupado de la comedia, por lo menos de la comedia hecha por humoristas, por lo que nunca nos hemos preocupado, ni hemos tenido relaciones. Como no te consideran, tienes que ir al margen. Han subvencionado 800 películas españolas sobre la posguerra y lo siguen haciendo, cosa que no entiendo, porque la gente ya conoce perfectamente lo que pasó en la posguerra. Y, sin embargo, no han' apoyado a películas que en taquilla hacen 500 o 600 millones de pesetas, y eso sí que hace industria.