El 'número dos' socialista pierde en cinco provincias de Andalucía

Alfonso Guerra ha quedado en clara minoría en Andalucía. Por primera vez desde 1976, los seguidores del vicesecretario general han presentado candidaturas propias. Y han perdido. Los renovadores andaluces, que se atribuían la victoria en cinco provincias, lanzaron ayer las campanas al vuelo, mientras los guerristas mantenían una actitud discreta. No obstante, el secretario general de los socialistas andaluces, Carlos Sanjuán, advirtió que no modificará sus proyectos tras la elección de delegados.Los partidarios de la renovación se atribuían una holgada mayoría en Sevilla, Jaén, Córdoba y Cádiz. En Granada, la balanza se inclinaba hacia los renovadores. Los guerristas sólo reivindicaron su superioridad en Málaga, mientras su victoria era también previsible en Huelva y Almería.

Los congresos provinciales para elegir delegados al congreso federal se realizarán el próximo fin de semana. Pero la elección por las agrupaciones de los asistentes a esas asambleas provinciales han anticipado el resultado político. La importancia del pulso del PSOE de Andalucía radica en estos momentos, al margen de las consecuencias electorales, en que sus representantes suman el 25,9% de los asistentes al congreso federal de marzo.

Las votaciones en varias agrupaciones malagueñas aportaron a los guerristas 186 compromisarios frente a 134 de los renovadores. Pero incluso esta correlación de fuerzas, que los renovadores no aceptaban, agravaría el precario liderazgo de Sanjuán, enfrentado al presidente regional, Manuel Chaves, alineado con González.

En Sevilla, cuyos resultados electorales de 1993 ensalzó Guerra, los renovadores lograron el 75% de los delegados para el congreso provincial. En Jaén consiguieron en tomo a 223 compromisanios de un total de unos 285 . En Córdoba obtuvieron el 95% y en Granada aventajaron ligeramente a los guerristas. Todo ello, según el vicesecretario general del PSOE sevillano, José Caballos.