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El Real Madrid limpia su camino

Una gran defensa en la segunda mitad, una noche afortunada de Sabonis y kilo y medio de imprecisión en el bando italiano fueron los ingredientes que permitieron al Madrid conseguir una importante victoria en Treviso y aclarar su continuidad en la Liga Europea de baloncesto. La ronda de cuartos de final está al alcance de la mano del conjunto de Luyk.La primera mitad mantuvo cierta igualdad ante el tono discontínuo mostrado por ambos contendientes. El marcador con el que se llegó al descanso no aclaró nada sobre la resolución final del partido: 39-38. Con la reanudación llegó el vuelco y el inicio de la reacción madridista. Varios retoques en la defensa blanca oscurecieron la labor anotadora del equipo italiano. El juego interior del Madrid, con Sabonis como abanderado, marcó la pauta del resto del enfrentamiento. Ante Sabonis, Rusconi se fue empequeñeciendo poco a poco hasta desaparecer. El gigante lituano anotó 28 puntos y se erigió en el más efectivo de la noche.

La diferencia en el marcador fue ampliándose hasta permitir gozar al Madrid de una decena de puntos a su favor. A cuatro minutos para el bocinazo final, el electrónico reflejaba ya 12 puntos de margen: 70-58.

El último intento del Treviso, con sus hombres clave cargados ya de personales por su juego apurado, resultó inútil. El Madrid, tranquilo y seguro de su victoria, administró bien la posesiones hasta alcanzar la cota final de 16 puntos de ventaja.

El hecho de que el Real Madrid haya ganado sus dos partidos contra el conjunto italiano favorece aún más sus posibilidades de acceso a la ronda de cuartos de final de la Liga Europea.

Derrota del Barcelona

El Limoges dejó ayer al Barcelona frente a un terreno lleno de minas (88-82). Un error mínimo y su objetivo de estar en los cuartos de final de la Liga Europea puede quedar destrozado. Le quedan seis partidos y debe ganar cuatro de ellos para asegurarse el éxito. El equipo azulgrana cuajó una actuación en la que fue perdiendo fuerza de forma acelerada. Salió predispuesto a sudar sangre en cada intento por recuperar el balón. Buscó con inteligencia las posiciones de tiro, siempre muy cercanas al aro, lo cual le dio canastas fáciles y muchos tiros libres (13 aciertos de 15 lanzamientos en la primera parte). Además, Roberts sacó provecho de su mayor rapidez en el marcaje al que fue sometido por Bilba, primero, y M'Bahia después, mientras que Epi fue superior en primera instancia en su emparejamiento con Dacoury.

El Limoges, que perdió muchos balones, tuvo que resignarse a perder el ritmo de juego en beneficio de su rival. Pero se mantuvo a flote gracias a su rebote ofensivo, a sus lanzamientos desde más allá de la línea de 6,25 metros y a la inspiración ya esperada de Mike Young, cuyo marcaje compartieron Fuentes y Jiménez. Gracias a ello logró enjugar su máxima desventaja, 19-27. Las tácticas de ambos equipos acabaron siendo tan descaradas que el Barcelona se situó en zona defensiva en los últimos compases del primer periodo, al que se llegó con 41-44.

La reanudación lo cambió todo. El Limoges mantuvo un buen ritmo de acierto en el triple, ¡acabó con 10 sobre 21 intentos, una insultante superioridad en el rebote ofensivo, pero además hurgó mucho mejor bajo el aro azulgrana pese a lo remisos que se mostraron en l lanzamiento sus pivots. De esta forma se fue haciendo con el control del partido, 66-62 hasta que logró la máxima diferencia ya cerca del final, 86-77. El Barcelona, entonces no tuvo otro remedio que resignarse a la derrota. e intentar mantener la diferencia de puntos por si se produce en la clasificación final un empate con e¡ equipo francés.

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