"No veo solución para los atascos de Madrid"
La Española para Europa 1993 lleva un corte de pelo escalonado y varios pendientes en una misma oreja. Tiene 24 años, es ingeniera de Telecomunicaciones, le obsesiona la energía solar y la ecología. Es de izquierdas, habla dos idiomas además del propio, detesta maquillarse y vive con sus padres desde hace 18 anos lejos del -centro de Madrid, aunque lamenta que hasta Majadahonda - también haya llegado el mundanal ruido. Cree en la unidad europea, pero se resiste al cierre a cal y canto, como si hubiera que protegerse de allende los mares. Al saber que el Parlamento Europeo la había escogido entre 700 aspirantes tan jóvenes, preparadas., cultas y estudiosas como ella, Estefanía Caamaño, enemiga de la cultura del hiper, sólo pudo lanzar un gesticulante"venga ya". Primero, porque no se considera una supermujer, y segundo, porque esta madrileña siempre pensó que este tipo de, condecoraciones estaban reservadas a la diplomacia. Los organizadores buscaban una mujer que diese el perfil de la nueva española, una mujer "interesada en los aspectos soCiológicos y modernos de la Europa actual". "No sé que pudieron ver en mí. Es más, sigo sin saberlo", dice. La organización y los pa trocinadores de concurso la hacen destinataria de 1.500.000 pesetas, que Estefanía Caamaño ha de invertir e invertirá en su profesión. La hucha será su doctorado en energía solar. Pregunta. ¿Su vida ha cambiado tras la elección del Parlamento Europeo?
Respuesta. No, porque sigo haciendo más o menos lo mismo que antes. Yo había pedido, sin tener éxito, varias becas. Ahora, con el dinero del premio haré exactamente eso, sacar mi doctorado en energía solar, que es la materia que más me interesa. Por lo demás, tengo que viajar y atender a la prensa, cosa que, por cierto, hago encantada.
P. Pero este premio no será como los concursos & Miss Europa, Mundo y Universo.
R. No, y, entre comillas, me alegro. Lo de lucirme por ahí no me interesa en absoluto, pero es muy interesante contactar con gente que pueda ser útil para mi trabajo sobre el tema energético.
P. Este galardón alejará el fantasma del paro.
R. Yo quiero quedarme en la Universidad y, Iras conseguir el doctorado, integrarme en el Instituto de Energía Solar. Si tuviera que salir a buscar trabajo a la empresa privada', lo tendría bastante mal.
P. Gustavo Villapalos, el rector de la Universidad Complutense, declaró en cierta ocasión que las Úniversitarias españolas, en general, eran más listas y más estudiolas que los hombres.
R. En nuestra escuela, la de Telecomunicaciones, hay un 25% de mujeres, una cifra que no está mal para lo que se veía hace 10 años. No sé ,si somos más listas, me parece más bien una cuestión de constancia, y eso lo he visto desde que estaba en el colegio.
P. En la Escuela de Telecomunicaciones han roto el tópico de los ingenieros cabezas cuadradas, demostrando un gran interés por las activida des culturales.R. Porque en una carrera, las asignaturas no lo son todo. Hay teatro, clubes de viajes, depoftes, conferencias. Me encanta, pero tampoco hay que llamarse a engaño: puede ser peligroso para alguien que llega de nuevas, porque en las ingenierías hay que estudiar mucho.
P. Usted vive en Majadahonda. Dígame cuáles son las ventajas y cuáles son los inconvenientes.
R. Yo soy de izquierdas, y la gestión del PP en el Ayuntamiento no me convence, especialménte por su actuación con los emigrantes. Campo, lo que se dice campo, por allí queda más bien poco, y en cuanto a los atascos para entrar en la ciudad de Madrid, no veo la solución por ningún lado. Yo tengo que acudir bastante al centro de la capital; me lo tomo con paciencia, un buen libro y en autobús. Madrid me encanta para salir y para divertirme.
P. Y, ¿qué le hace más daño al movimiento ecologista: el desinterés oficial o la moda?
R. Por mi trabajo, me interesa enormemente el tema medioambiental,en España, y me parece fatal que no aprovechemos la enorme riqueza de este país. Evidentemente, el tema está de moda, y eso es malo, porque muchos se apuntan sólo para ver lo que pillan. La ecología no puede ser un negocio.
P. Protestan los universitanos: quieren pagar menos y tener más sitio para aprender.
R. En mi escuela, la masificación no es tan grande, pero se nota el boom, porque los edificios se construyeron para muy pocos ingenieros. Sobre la cuestión de las tasas, yo no creo que se pague demasiado. Quizá, quienes podemos, tendríamos que pagar mas.
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