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ELECCIONES EN GALICIA

"Don Manuel está como nunca", exclama Fraga

"¡Don Manuel está como nunca!". No lo dijo ningún dirigente del Partido Popular entusiasmado por los resultados electorales. Lo dijo el propio Fraga de sí mismo. A su lado estaba el presidente nacional del PP, José María Aznar, quien, al ser preguntado por una cadena de televisión sobre cómo se encontraba el presidente electo de la Xunta, acababa de contestar muy diplomáticamente que se encontraba muy tranquilo. Pero Fraga se revolvió en el asiento y exclamó, aunque no se oyó por los micrófonos de la televisión: "¡Qué va! ¡Don Manuel está como nunca!".

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Pocos minutos después, cuando apareció en una conferencia de prensa, el líder popular de Galicia adoptó un tono institucional y una actitud relajada, y cofesó que se sentía abrumado por la generosidad y confianza en él depositadas.Con una amplia y cómoda mayoría absoluta ya en el bolsillo y con un resultado que convierte a su partidoen la primera fuerza política de las cuatro rovincias gallegas, Manuel Fraga se mostró generoso en el juicio sobre sus adversarios, y dialogante con las fuerzas económicas y sociales.

Pero más allá de la diplomacia, el presidente electo de la Xunta hizo un llamamiento formal al Bloque Nacionalista Galego (BNG) para que "utilice responsablemente la fuerza que el pueblo de Galicia le ha dado" en las elecciones gallegas. De hecho, el grupo encabezado por Xosé Manuel Beiras tiene visos de convertirse, al haber triplicado su representación parlamentaria y haberse caracterizado por su beligerancia, en la principal fuerza de oposición.

El fundador del Partido Popular, flanqueado por José María Aznar. y José Cuiña, este último secretario general del PP de Galicia y consejero en funciones de Ordenación del Territorio en la Xunta, dedicó las primeras palabras en su comparecencia ante los medios de comunicación a agradecer emocionadamente el respaldo electoral del pueblo gallego.

El veterano líder conservador aprovechó la oportunidad para resaltar el espectacular apoyo que había conseguido en Villaba (Lugo), su localidad natal; en Perbes (La Coruña), su lugar de veraneo, y en el barrio donde reside en Santiago de Compostela.

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Guiado por unas notas manuscritas en unas pequeñas cartulinas, Manuel Fraga proclamó sentirse imbuido de un compromiso como el que "uno tiene con la patria y con la familia", que pesará sobre él el resto de su vida, según proclamó con solemnidad.

Gratitud a Aznar

Tras asegurar, no menos ceremonioso, que no tenía palabras para expresar toda su gratitud a José María Aznar y a los demás dirigentes nacionales del PP por la ayuda que le han prestado, enjuició como "mediocres" los resultados del PSOE. Una debacle electoral que relacionó con la política seguida por el Gobierno de la nación en los cuatro últimos meses, aunque evitó utilizar adjetivos descalificadores.

Aunque un periodista le preguntó si mantenía la metáfora según la cual se siente como Sansón contra los filisteos, rehuyó repetir esas mismas palabras y matizó que el término filisteo lo acuñaría, en todo caso, en sentido literario y no bíblico. En cambio, sí recurrió a una imagen bíblica para señalar que sus mandamientos para los próximos cuatro anños se resumen en dos: contribuir al desarrollo de Galicia y a la creación de empleo.

Aunque abordó el asunto sólo de pasada, el líder popular de Galicia dejó claro que se deben tomar muy en serio sus palabras acerca de que éstas son las últimas elecciones autonómicas en las que él se presenta como candidato a la Presidencia de la Xunta.

Fraga cuenta ahora 70 años, y cuando termine esta legislatura contará 75. Ayer se mostraba exultante y relajado, en compañía de su mujer, Carmen Estévez, de José María Aznar, de el ex presidente de la Xunta Gerardo Fernández Albor y de numerosos dirigentes nacionales y diputados de su partido cuando entró bajo los vítores de "¡presidente, presidente!", en el hotel de Santiago donde su partido festejó con una alegría desbordada el triunfo electoral. Manuel Fraga remachó ante los suyos: "Yo he sido como el director de orquesta, que no toca ningún instrumento pero hace que todo suene bien".

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