"Sigo con pesadillas"

El socialista Emilio García Horcajo, ex concejal de Seguridad Ciudadana de Madrid, era ayer un hombre a la defensiva. En su calidad de abogado, acudió a la Sala de Vistas número 0 de la Audiencia de Madrid vestido con una toga y se sentó a distancia del resto de procesados, como para alejar de sí la tragedia que un 17 de diciembre de 1983 sacudió España. Durante el juicio petrificó el gesto. Tampoco se le vio mirar a su espalda, donde se agolpaba el torbellino de dolor de los familiares de las víctimas. Algo escondían tantas precauciones, algo que al finalizar la vista brotó por boca de García Horcajo: "Sigo teniendo pesadillas por lo sucedido". No es el único. 13 acusaciones particulares le consideran culpable por no haber ordenado la inspección de la discoteca Alcalá 20, pese a tener las competencias para ello. De su condena o absolución depende que el Ayuntamiento sea considerado responsable civil subsidiario y corra con las indemnizaciones."El fiscal no me culpa de nada. Y las acusaciones están en defensa de unos intereses no sólo personales sino también económicos, que son respetables. Lo que quiero es que este juicio se termine cuanto antes para que se clarifiquen las responsabilidades". ¿Pero volvería a hacer lo que hizo? "Mire usted, yo no pude hacer otra cosa porque no hice nada contrario a ninguna normativa ni nada que diera pie a ese lamentable siniestro", respondió a este periódico Horcajo. Había terminado la vista. Su mirada vagaba por entre los familiares. "Después de ellos, que sin duda son los que más sintieron la lamentable perdida, yo creo que inmediatamente estoy yo, que he sufrido lo indecible como consecuencia de esa lamentable tragedia" respondía.

El ex concejal se ve a sí mismo como una víctima. "No es que me sienta dañado por las acusaciones, sino por una situación procesal que menoscaba determinadas opiniones. Esto ha influido en mi actividad política, sin duda". García Horcajo ha abandonado la vida pública.