El Leganés se enfrenta a sus carencias
La apuesta romántica de un equipo semiaficionado en Segunda División
El sur de Madrid ya no es un don nadie en el fútbol español. El Leganés lo ha sacado de las tinieblas. El ascenso del equipo pepinero a Segunda División ha dado un nuevo sentido a los domingos de las 173.000 almas M pueblo más habitado de la Comunidad. Además. ha clavado una espina en la espalda de su eterno rival, el Getafe, depositario hasta ahora de la escasa gloria futbolística de la periferia de la capital. El reto de esta temporada es mantenerse entre los grandes.
El ascenso del Leganés representa también una opción romántica: el último gol del amateurismo en la jungla del fútbol profesional. Ocho estudiantes, dos parados, tres vendedores, un profesor, cinco empleados, dos administrativos y un camarero trajeron la gloria a la ciudad.Para mantener la categoría cuentan con las mismas armas de la temporada pasada: mucha ilusión y poco dinero. El Leganés parte con 115 millones de presupuesto. El Betis gastará más de 1.000, y el Español, cerca de 900. Los jugadores de estos dos clubes históricos cobran fichas millonarias, entrenan por la mañana y viven exclusivamente del fútbol. Los hombres del Leganés trabajan todo el día y apenas les queda tiempo para estar a las siete de la tarde, de martes a viernes, en el campo municipal.
La cantera es la base de la plantilla. Sin dinero, el Leganés no puede plantearse fichajes de postín. Las adquisiciones se hacen con cuentagotas y se mira el precio con lupa. Perepadenko, un ruso de 20 años hermano de un jugador del Badajoz, fue descartado tras estar unas semanas a prueba. Andrés, ex jugador del Rayo Vallecano, y Tino, actualmente en las filas de la Ponferradina, son los próximos refuerzos de un colectivo sin extranjeros y una media de edad de 23 años.
El comienzo de temporada ha sido titubeante. El equipo es decimoséptimo, con dos puntos y dos negativos. Ha empatado dos veces en su estadio, ante Villarreal y Mallorca, y ha perdido en Compostela y Marbella.
Muchas bajas
Hoy (a las 12.00), ante el Toledo (4º, 6+2), otro debutante en la categoría, tiene la oportunidad de sumar su primera victoria. El Toledo llega a Leganés con la etiqueta de matagigantes y 1.500 hinchas dispuestos a dejarse las gargantas para animarlo (el aforo del campo municipal es de 5.000 espectadores).
.La directiva ha declarado el partido como Día del Club. La entrada más barata cuesta 2.000 pesetas; los socios tienen que pagar la mitad.
El entrenador local, Luis Ángel Duque, no podrá contar con Vico, Barba, Miguel Ángel, Dorado y Pizarro. May y Mesas, tocados, serán duda hasta minutos antes del inicio del encuentro.
El técnico pepinero tiene mucho respeto al rival: "No me sorprende la buena clasificación del Toledo. Tiene una gran plantilla y ha hecho buenos fichajes".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.