El Deportivo no pudo celebrar su fiesta con un triunfo ante el Rayo

Fue como el partido del día grande de las fiestas, con lanzamiento de cohetes y desfiles de charangas y de centenares de niños vestidos de blanquiazul. Hasta el árbitro, Casajuana Rifá, celebraba su despedida del fútbol.Aligerados de presión, Deportivo y Rayo intentaron disfrutar del juego y rizar el rizo de la estética. Para esta exhibición, los coruñeses mostraron mejores dotes, pero toda la pólvora se les fue en salvas. El Rayo aprovechó una de sus escasas ocasiones e impidió al Deportivo completar la fiesta por la mejor temporada de su historia. A pesar de todo, miles de aficionados invadieron el campo al final del encuentro y aclamaron largamente a su equipo.