Grata sorpresa

Ante la reciente convocatoria de elecciones generales, nos ha sorprendido gratamente la noticia de la incorporación de personas independientes en puestos relevantes, no como figurantes, de diferentes candidaturas. Con ello se reconoce que la figura del independiente en la vida política no ha muerto, como pretendieron los partidos en los últimos años.Sería deseable que gran número de partidos incorporase a sus listas, con posibilidad de ser elegidos, a personas progresistas y solidarias, comprometidas con la sociedad en la que viven, defensoras sin desmayo de la ética y los derechos humanos.

No puedo evitar la mención de Victoria Camps -teniendo en cuenta que se habla tanto de otras personas-, ya que entiendo que es muy importante y válido lo que ella, y otras muchas personas como ella, pueden aportar a la vida política en estos momentos. Recuerdo, cuando me fue presentada por mis amigos María Jesús y Tomás, que inmediatamente me habló de las "virtudes públicas" -la solidaridad, la responsabilidad, la tolerancia...- como cualidades básicas del sujeto democrático; su ilusión por cambiar el sentido de la moral de nuestro tiempo; la apuesta por causas impopulares o perdidas.-