Cuatro 'boixos nois' no podrán acceder a recintos deportivos en tres años

La Comisión contra la Violencia en el Deporte propuso, en la reunión que mantuvo ayer, una de las sanciones más fuertes de su historia para cuatro boixos nois, espectadores del partido de hockey sobre patines Reus Deportivo-Barcelona por utilizar sprays de los que se usan como autodefensa y que motivó la suspensión del encuentro durante 15 minutos. La Comisión ha propuesto al Gobernador Civil de Tarragona que prohiba a los cuatro espectadores identificados, de los nueve que protagonizaron los incidentes, el acceso a recintos deportivos durante tres años -el castigo máximo contemplado por la Ley es de cinco - y una multa de 250.000 pesetas a cada uno de ellos por cometer una falta considerada grave.

El partido, correspondiente a los cuartos de final de la Copa de la CERS y que finalizó con empate a cinco goles, lo que permitió al Barcelona pasar a semifinales tras ganar en la ida por 7-6, tuvo presidido por los incidentes protagonizados por los boixos nois. Además de la interrupción del partido en su segunda parte debido a los incidentes, 10 espectadores debieron ser atendidos de conjuntivitis producida por el uso de los citados sprays de gases lacrimógenos.

La Policía logró detener en la calle, después de que abandonara corriendo el recinto deportivo, a uno de los boixos nois a los que se ha propuesto sancionar, Alejandro Sumoy Batet. Su detención permitió, además, identificar a otros tres compañeros que han sido propuestos para sanción. Se trata de Antonio Luco Morán, Jordi Calvet Boronat y el menor P.G.C.

La Policía continúa sus investigaciones para identificar a a los otros cinco boixos nois que participaron en la agresión a los aficionados del Reus. Al mismo tiempo siguen las diligencias abiertas en el juzgado de instrucción número 5 de Reus, en el que los encausados fueron puestos a disposición judicial por la policía.