Las expropiaciones amenazan con retrasar el nuevo conducto de agua

Algo tan elemental como elegir bien el suelo por donde enterrar enormes tuberías se ha convertido en una amenaza de retraso en las obras de construcción del conducto de emergencia aprobado por el Gobierno para ampliar el abastecimiento de agua a Madrid. Si las fincas son mayoritariamente privadas habrá que recurrir a las expropiaciones, y éstas retrasarán el proceso varios meses. El recorrido de la nueva conducción tampoco está decidido. Técnicos de la Confederación Hidrográfica del Tajo y el Canal de Isabel II discrepan sobre el trazado del trasvase, que se acordará hoy.El Consejo de Ministros ratificó hace una semana la partida presupuestaria para abordar el proyecto (8.000 millones de pesetas), y ya entonces tanto el ministro de Obras Públicas y Transportes, José Borrell,. como el presidente regional, Joaquín Leguina, anunciaron que llegaría agua a Madrid del nuevo trasvase del río Alberche para octubre. Estas optimistas previsiones son imposibles de cumplir.

El Canal defiende una conexión también en el río Alberche, pero junto al pantano de San Juan, para encaminar la obra luego en paralelo a la tubería actual que ya sale del embalse de Picadas y a la altura del río Aulencia dividirse y dirigir el tubo hacia Valmayor. La Confederación prefiere realizar la nueva toma también en Picadas.

No antes de un año

Los dos proyectos se encuentran con el inconveniente de las expropiaciones de las fincas por las que tiene que cruzar la macrotubería de dos metros de diámetro y unos 25 kilómetros de largo. Fuentes del Canal informaron ayer que se está estudiando sobre el terreno un recorrido que aproveche al máximo las cañadas y reservas de suelo públicas.

El conducto, además, tiene que atravesar una zona montañosa llegando ya a Valmayor, que se superará mediante un túnel de 2,5 kilómetros de longitud. La obra se dividirá en cuatro contratas para agilizar.

Roque Gistau, director gerente del Canal, aseguró ayer que la conducción es absolutamente necesaria y que "estaba prevista en el Plan Hidrográfico", y también afirmó que en el río Alberche hay, agua suficiente para los dos trasvases. Gistau aclaró que tener en marcha en un año el segundo trasvase del Alberche sería "una machada".

Agapito Ramos, consejero de la Presidencia de la Comunidad y máximo responsable del Canal, firmó ayer un convenio de colaboración con el presidente de la empresa alemana Siemens Nixdorf, Francisco Francés, para desarrollar un programa informático que agilice la localización geográfica de averías y fugas en la red de distribución del Canal (5.000 kilómetros).

Una de las mejoras del sistema, que en cualquier caso no se apreciará en menos de dos años, es que permitirá reducir el tiempo de resolución ante la aparición de una incidencia.