Las exportaciones de EE UU se derrumban y disparan el déficit comercial de agosto

El presidente de Estados Unidos, George Bush, no sólo se vio derrotado ayer por su contrincante demócrata en el debate presidencial, sino por las cifras del Departamento de Comercio que indican un aumento del déficit comercial del 23,8% en el mes de agosto y la peor caída de las exportaciones en cinco años. Estos datos muestran que, en contra de lo que el presidente sostiene en su campaña para la reelección, los síntomas de la economía norteamericana no apuntan hacia una sólida recuperación.El déficit comercial del mes de agosto fue de 9.000 millones de dólares (más de 900.000 millones de pesetas), casi 1.500 millones superior a lo que se esperaba. Este es el peor resultado desde marzo de 1990, y coincide en el momento más álgido de la recesión económica. En los primeros ocho meses de 1992 el déficit acumulado ha crecido en 77.840 millones de dólares (cerca de 8 billones de pesetas), 12.000 millones de dólares más que el total del año anterior.

Las exportaciones, que han sido una de las principales apuestas de la campaña electoral de Bush en su plan de recuperación económica, cayeron en agosto un 6,1% para quedar en 35.500 millones de dólares. Las ventas de automóviles en el exterior son las que más han bajado y hacen prever nuevos ajustes por parte de los fabricantes norteamericanos.

También las importaciones se redujeron -un 1,3%-, lo que viene a demostrar que el consumo interno sigue sin crecer, porque los consumidores estadounidenses no han recuperado la confianza respecto a una inminente salida de la crisis. La demanda interior es el primer síntoma de recuperación y, hasta el momento, se mantiene estancada.

Debilidad japonesa

El déficit global ha crecido a pesar de una pequeña reducción en el gasto del petróleo importado -de 4.800 a 4.490 millones de dólares- y también de un recorte de 200 millones de dólares en el déficit con Japón, que constituye la parte más importante del déficit total. En un momento en el que la economía japonesa atraviesa también por un momento delicado y se espera una reducción de la demanda en aquel país, no se puede contar para el futuro con ese mercado como un medio adecuado para reducir el déficit norteamericano. En cuanto a Europa, donde las perspectivas son tan pesimistas como en el caso japonés, el déficit se ha reducido de los 1. 140 millones de julio hasta los 786 de agosto, con una ligera caída de las exportaciones norteamericanas.El presidente Bush ha dedicado grandes esfuerzos en los últimos meses a acelerar la creación del Tratado de Libre Comercio con México y Canadá como vía alternativa para incrementar sus exportaciones.