Tailandia juzga a los militares en las urnas
Las elecciones legislativas que hoy se celebran en Tailandia servirán para conocer la opinión de la sociedad sobre la actuación de los militares en la brutal represión de mayo, cuando acabaron con una manifestación estudiantil con un balance de 50 muertos.
Un soldado de servicio en las proximidades del monumento a la Democracia de Bangkok, convertido en panteón por estudiantes, jóvenes profesionales y familiares de las víctimas, asegura no haber recibido instrucciones de sus mandos sobre a quién votar. "Todavía no lo he decidido", miente. De ser cierta la afirmación del soldado, sería la primera vez en décadas que el generalato instalado en el poder económico y político de este país asiático no imparte órdenes a la tropa sobre el candidato a apoyar.La campaña previa a la emisión del voto terminó la noche del viernes con multitudinarios mítines de la oposición. Tailandeses menores de 40 años constituían el grueso de los asistentes a unos actos donde pocos confiaban en una modificación sustancial de la tradicional correlación de fuerzas parlamentarias. Las urnas, y el dinero también, decidirán los 360 escaños de la Cámara de Representantes y el nombre del próximo primer ministro, que deberá ser miembro electo del Parlamento al entrar hoy en vigor una enmienda constitucional que así lo decide.
"Bangkok lo tenemos ganado, pero la compra del voto sigue siendo masiva en las provincias y quienes disponen de más fondos para hacerlo son los partidos promilitares", se lamentaba un profesor de universidad partidario de Chamlong Srimuang, antiguo gobernador de Bangkok y monje budista, que desencadenó con una huelga de hambre las violentas protestas del 18 y el 19 de mayo contra la corrupción política. El general retirado advirtió ante una multitud de 20.000 personas que no admitirá el fraude electoral.
En posterior conferencia de prensa, amenazó con retirarse de la política si advertía trampas durante el escrutinio. Alguien recordó entonces que 24 horas después de haber anunciado su ayuno hasta la muerte Chamlong pidió permiso "a las masas" para empezar a comer.
El Gobierno más eficaz
El Gobierno provisional de Anand Pamyarachun, quizá el más eficaz de la historia tailandesa en el desbroce del camino hacia la democracia, ha cumplido en su interinidad con las expectativas depositadas en él por las fuerzas políticas y empresariales que estiman imprescindible un repliegue castrense no solamente para homologar democráticamente el país, sino también para fortalecer un crecimiento económico que consideran frenado, por los presidentes de consejos de administración con estrellas en la bocamanga.Hace dos días, 557 oficiales implicados en mayor, o menor medida en la represión de hace cuatro meses fueron transferidos a destinos burocráticos y ayer se anunció un decreto por el que queda disuelta la Comisión Judicial nacional de dudosa credibilidad e independencia.
Los últimos sondeos de opinión anticipan un voto repartido entre las fuerzas democráticas, los ángeles, y los comprometidos con el estamento castrense Í los demonios, que se llevan el 14,7% del presupuesto nacional.
La mayoría de los comentaristas coinciden en que los primeros ganarán votos respecto a anteriores comicios y descartan que alguno. de los contendientes al cance la mayoría absoluta. El mantenimiento de la alianza de los cuatro partidos agrupados en mayo contra el depuesto Suchinda será fundamental para colocar a uno de sus dirigentes en la jefatura de Gobierno. Distanciados sobre la estrategia a seguir en la nueva situación, los cinco partidos con candidatos uniformados o más comprometidos con los militares, cuya agrupación facilitó en marzo la investidura de Suchinda, deberán igualmente solventar sus diferencias si quieren seguir en el poder.
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