Aclaración de Leonardo Boff

Quiero negar por completo la noticia Boff quiere tener un hijo (EL PAÍS, 9 de agosto). En un programa de la televisión Manchete, en el 7 de agosto, junto con el líder político Lula, asistido por el periodista que lanzó la noticia en O Globo, yo no dije que quería tener un hijo, de ninguna manera. Yo dije que cuando tenía 40 años (hoy tengo 53), pensé: qué bueno sería tener un hijo, enseñarle una imagen mejor de Dios, ayudarlo a descubrir los misterios de la vida, etcétera. Pero era la voz de la sangre, de la perpetuidad de la vida. ¿Cómo tener un hijo si no tengo mujer? Eso fue 13 años atrás.Incluso dije que no quería ni casarme ni tener hijos, para no ser padre ni abuelo a la vez. En, forma de broma dije que ya tenía demasiados hijos, pues tengo más de 60 libros. Hay un esfuerzo de las derechas para distorsionar mi decisión. Primeramente afirmaban que era para casarme. Y eso no pasó. Ahora inventan que quiero tener un hijo sin casarme. El programa fue visto por millones de personas. Nada, pues, de esto de tener un hijo.-

Con gran tristeza hemos recibido la noticia de la renuncia al sacerdocio del teólogo brasileño Leonardo Boff. Tristeza no porque cambie para nosotros su testimonio y voz profética, ya que, por el contrario, creemos que ahora va a ser más libre para anunciar el reino de Dios entre los oprimidos, sin tener que estar continuamente amordazado por Roma. Pero sí tristeza por el largo sufrimiento que ha tenido que padecer nuestro hermano Boff para querer mantener hasta el final la comunión eclesial y el darse cuenta que al hacerlo incumplía su deber profético de denuncia de las injusticias y opresiones que ocurrían a su alrededor. Y tristeza también porque algunas altas jerarquías de la Iglesia (como Ratzinger y su Congregación para la Doctrina de la Fe) continúan acallando oficialmente a las voces proféticas de la teología de la liberación.

En momentos como estos recordamos frases del evangelio, como la de que "La verdad os hará libres" y su mensaje de fondo sobre el que el bien vencerá al mal.- María del Carmen Romero Sánchez y dos firmas más. Cartagena.