Woody Allen acusa a Mia Farrow de venganza

Woody Allen rompió ayer públicamente con Mia Farrow. El cineasta, de 56 años, se vio obligado a dar la cara para desmentir las alegaciones contra él por supuesto abuso sexual de dos de los 11 hijos de la actriz, de 47 años, con la que ha compartido vida y profesión durante 12 años. Tras reafirmar su amor por la veinteañera Soon-Yi, una de las hijas adoptivas de su ex compañera, Allen arremetió contra Mia Farrow. "Es una manipulación sin escrúpulos y horriblemente dañina para niños inocentes por motivos de venganza y de interés personal", afirmó en una insólita comparecencia ante los periodistas en Nueva York. La dramática ruptura entre ambos divos quedó al descubierto cuando Allen demandó la custodia de los tres hijos, uno natural y dos adoptivos, que llevan su apellido. Ocho meses después de intentar arreglar los detalles de la separación, relata Allen, "de repente me vi acusado de haber molestado a mi hija de siete años y a mi hijo de cuatro". Asimismo, reveló que los abogados de la actriz le propusieron que pagara siete millones de dólares (cerca de 700 millones de pesetas) a cambio de retirar las acusaciones vertidas contra él.