_
_
_
_

El nuevo Milan, obsesionado por un único objetivo: ganar todos los torneos

¿A quién elijo?, ¿a quién descarto? Fabio Capello se enfrenta a una complicación, sí, pero relativa. El técnico del Milan -un equipo obsesionado por un único objetivo: ganarlo todo puede permitirse el lujo de barajar en la Liga italiana futbolistas de tanta calidad que, salvo accidente, el resultado debe ser positivo juegue el que juegue. De momento, sus primeros ensayos tienden a asignar la titularidad a los holandeses Rijkaard y Van Basten y al francés Papin y la suplencia al croata Boban, que incluso podría ser cedido otra vez; al yugoslavo Savicevic y al también holandés Gullit.

Más información
Los ataques de la oposición

La vocación dominadora del Milan de Silvio Berlusconi es inequívoca. Su paseo triunfal por su último campeonato nacional, en el que pulverizó los récords al concluir invicto (22 victorias y 12 empates), no le ha hecho dormirse. Su retorno a Europa, a la Copa que contempló su supremacía en 1989 y 1990, después de su exclusión durante una temporada por la retirada de sus jugadores en su partido de Marsella, ante el Olímpico, en las semifinales de 1991, pretende ser un éxito. Este mismo conjunto francés; el Leeds, inglés; el Stuttgart, alemán; el Eindhoven, holandés; el Oporto, portugués, y, por supuesto, el Barcelona, el campeón vigente, son adversarios potentes. Pero Fabio Capello dispone de cinco grandes refuerzos en los que su club ha invertido unos 5.600 millones de pesetas: los centrocampistas Lentini (1.850, del Torino), Savicevic (1.000, del Estrella Roja), Eranio (1.000, del Génova) y De Napoli (550, del Nápoles) y el delantero Papin (1.200, del Olímpico de Marsella). Además, cuenta con Boban, que costó en su día 1.000 (del Hask Gradanski, antiguo Dinamo de Zagreb), fue cedido al Bar¡ en la campaña anterior y quizá sea prestado de nuevo.Así, el técnico que asumiera brillantemente la responsabilidad de sustituir al celebrado Arrigo Sacchi, el actual seleccionador italiano, se enfrenta a un problema que para sí quisieran sus colegas: elegir el once más conveniente sabiendo que casi, casi, podría designar otro de parecidas garantías. La cuestión que se debate en los primeros entrenamientos es quiénes serán los tres extranjeros titulares en la Liga, de acuerdo con el cupo establecido para ellos por la federación Las pruebas iniciales favorecen a Rijkaard (29 años), Van Basten (27) y Papin (28), que rompería el trío holandés a costa de Gullit (29), cuya ocasión, como la de Savicevic (25), se presentaría en la Copa de Europa al permitirse un mayor número de foráneos sobre el césped.

Las relaciones

Uno de los temores es que las tensiones surjan entre ellos. En principio, sin embargo, las relaciones se antojan buenas y es presumible que no cambien si Capello maneja bien su mano izquierda y, obvio, los triunfos se suceden. Por lo pronto, Van Basten hasta se apresura a ofrecer a Papin un penalti -detalle que éste agradece, pero rechaza- y proclama que "el único intocable" es Rijkaard; Gullit se prepara en silencio, aunque pensando acaso en el Marsella, y Savicevic se limita a decir que no es "inferior a nadie".

Los primeros ensayos tácticos en los encuentros amistosos han estado mediatizados por las ausencias del portero Antonioli y el centrocampista Albertini, participantes en los Juegos Olímpicos, y del defensa Galli, el medio De Napoli y el delantero Serena, lesionados. De todas formas, Capello ya ha podido comprobar que las combinaciones a su alcance son múltiples -varios jugadores, comoGullit, Savicevic, Eranio y Massaro son polivalentes- y la mayoría harto efectivas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_