"El balón me sigue a todas partes aunque me dé en el culo"

Jesús Gil y Futre llegaron a un acuerdo el miércoles pasado para la renovación de su compromiso.

Pregunta. ¿De qué depende su firma definitiva?

Respuesta. Prácticamente, está todo hecho. Pero es evidente que va a ser mi último contrato. La única diferencia es la duración. Mañana o pasado volveré a hablar con Gil. Hay un 95% de posibilidades de que me quede.

P. ¿Atraviesa el mejor momento de su carrera?

R. Sí. Todo me sale bien. El balón me sigue a todas partes. Me da en la rodilla y se me queda delante. Me da en el culo y se me queda delante. Es impresionante. Me obedece siempre.

P. ¿En qué ha cambiado para llegar a su actual estado?

R. Sobre todo, en la experiencia. Soy más maduro como persona y como jugador. Un futbolista necesita sentirse bien consigo mismo. Yo lo estoy. Pero, aunque la gente convierte ahora en genial todo lo que toco, mantengo los pies en el suelo.

P. ¿Le asusta que se le cargue con demasiada responsabilidad?

R. No. Sé que sólo soy un jugador importante en el Atlético o un hombre clave en su sistema. Para ganar una Liga, tenemos que estar bien todos. Yo solo no podría hacer nada, por más que la gente se centre ahora en mí. Por eso, si ganamos la Liga, lo mismo me conceden a mí el balón de oro. Siempre hay 10 o 15 jugadores en el mundo que están en un nivel muy alto. En ese grupo sí estoy. No sé cuánto tiempo podré mantener mi racha. Pero sé jugar al fútbol y no me voy a olvidar de ello fácilmente.

P. Ya no se cae tanto dentro del área. ¿Por qué?

R. Aunque a estas alturas es muy difícil cambiar mi manera de jugar, lo cierto es que me caigo menos. Yo mismo me sorprendo. Por ejemplo, al ver las imágenes del último gol que le marcamos a la Real Sociedad hace unas jornadas. Antes no habría sido gol porque habría estado en el suelo. Sin embargo, acabé la jugada. Es la experiencia, nada más.

P. Se le critica por no asumir el liderazgo del equipo.

R. Por mi manera de jugar, no puedo ser un líder dentro del campo. Yo puedo arrastrar a mis compañeros cuando creo peligro. Pero un líder es el que sabe tranquilizar al equipo cuando tiene prisa. Schuster, obvio, es mucho más líder que yo.

P. ¿Su transformación en el campo le ha afectado en su comportamiento fuera de él?

R. Mucho. Con 23 años, no era maduro para ser el capitán. Me faltaba demasiado. No tenía experiencia. Era muy joven. En este tiempo he aprendido bastante y ya estoy a la altura del cargo. Pero siempre estuve al lado de mis compañeros. El año pasado también defendí a Juan Carlos cuando el presidente le apartó. Pero ahora todo lo que hago se magnífica porque en el campo me salen bien las cosas.

P. ¿Llegó a estar harto de Gil?

R. Hemos tenido peleas muy duras. Pero después de la tempestad siempre ha venido la calma. Ahora nos vemos menos, pero por su cargo político.

P. ¿Luis es el responsable de su situación actual?

R. El entrenador, por supuesto, tiene mucha culpa. No sólo de los goles y del juego, sino de todo lo que me está pasando. Me ha mentalizado bien. Es el técnico que más me ha ayudado.

P. ¿Quién ha sido más rentable para quién: el Atlético para usted o al revés?

R. Depende. Más o menos. Hemos sufrido mucho tanto el Atlético como yo. En estos cuatro años y medio sólo hemos tenido una alegría que saborear: la Copa del pasado.

P. ¿Su juego habría tenido más repercusión en otro equipo?

R. Mi cotización ha permanecido alta pese a todo lo que me ha ocurrido aquí.