El cura Treviño afirma que rechaza los métodos etarras
El arcipreste de Irún y Hondarribia, José Ramón Treviño, encarcelado por su presunta colaboración con la banda terrorista ETA, dijo ayer, en declaraciones realizadas desde la prisión de Alcalá Meco a Antena 3 Radio, que él no ha colaborado con ETA y que está en contra de los métodos utilizados por los terroristas: "Condeno y rechazo los métodos violentos de ETA. He dicho reiteradas veces que la violencia no conduce a ningún sitio". "Estoy de acuerdo con que hay asignaturas pendientes, reivindicaciones sociales y políticas en nuestro pueblo, pero me parece que tenemos que ir hacia la consecución de esos derechos o de la respuesta a esos derechos a través de los métodos pacíficos", añadió Treviño. Según el arcipreste, la forma a través de la cual se tiene que solucionar esa "asignatura pendiente de la reconciliación y normalización de nuestro pueblo está en los caminos pacíficos".Treviño añadió en sus declaraciones que no considera que haya cometido ningún delito: "Yo no soy colaborador de banda armada alguna porque eso repugna mis principios; no puedo reconocer eso porque me causa un daño impresionante,. daño a mi vida pastoral, a mi sacerdocio y a mi parroquia. Rechazo la violencia que se ejerce también sobre los derechos de las personas y de los, pueblos". "Quiero reiterar", añadió, "mi firme adhesión a la paz, al diálogo, a la reconciliación de todos. Quiero decir, sencillamente, que condeno toda violencia, la de ETA y la de todos aquellos que conculquen los derechos humanos".
"Ha sido la experiencia más dura de toda mi vida, pues he pasado de una realidad humana muy gratificante a una situación de verdadero acoso", señaló sobre su detención y posterior encarcelamiento. "Me he sentido acorralado. La tortura psíquica ha sido muy fuerte, porque ha habido muchos insultos que me han dolido".
Golpeado
A nivel de tortura física", señaló, "he, sido golpeado en un par de ocasiones. Me he sentido en una situación casi de enajenación, de vaciamiento personal, aunque tampoco quiero hacerme víctima de la situación, porque entiendo que ha pesado el reconocimiento del sacerdocio en aquellos que me interrogaban".
Respecto al vicario de la diócesis, José Antonio Pagola, y al obispo de San Sebastián, José María Setién, Treviño señaló que los conoce y que siempre han hecho una condena sin paliativos de los métodos violentos.
"Con Pagola", declaró José Ramón Treviño, "tuve una conversación sin mayor intencionalidad; le cuento el tema para que él supiera lo que había ocurrido. Le hablo del sobresalto que me causa la llegada de [Ignacio] Rekarte [presunto miembro del comando Mugarril y su andadura a través de la droga, que es lo que a mi me preocupa. Yo no tenía más conocimiento, únicamente lo que me preocupaba era la andadura de ese joven ( ... ) que es un feligrés mío, con quien he tenido una situación muy cercana, y esa persona me pidió pasar la noche allí [en la parroquia que regentaba].
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