El Estudiantes lográ su objetivo

, Estudiantes mantiene la segunda plaza de la Liga europea al perder por menos de seis puntos en la cancha del Philips de Milán. Un providencial rebote con canasta de Aisa sobre el pitido final dejaba el marcador en un justo 70-65. El encuentro fue malo. Ninguno de los dos conjuntos logró imponer un ritmo de juego, y los errores se sucedieron por ambos bandos. Los árbitros no quisieron estar fuera en esta guerra de despropósitos, y se mostraron descaradamente caseros durante 39 minutos. Los italianos dieron una imagen tan desangelada y distante como la que ofreció su público. Ni unos ni otros son lo que eran, por fortunapara los hombres de Miguel Angel Martín. La primera parte acabó con un pobre 33-32, buena prueba de la inoperancia ofensiva de ambos conjuntos. Sólo los árbitros dejaron ver sus cartas cuando a un minuto del descanso sólo hablan pitado tres faltas a los jugadores del Philips. Orenga, Winslow y Herreros, por contra, calentaban banquillo con tres personales cada uno. En la segunda parte llegaron los mejores momentos italianos. Una defensa en zona 32, muy presionante, neutralizó el ataque de Estudiantes y permitió al Philips alcanzar una máxima diferencia de 11 puntos (52-41) a falta de 10 minutos. Folloneros y descentrados, los italianos son una sombra de lo que fueron: un Riva fuera de forma ha dejado de ser la guillotina de su equipo. Gorila Dawkins intimida, pero nada más. Sólo Pittis cargó con la responsabilidad de jugar los balones comprometidos.

En Estudiantes, Herreros y Winslow se mostraron irregulares, pese a conseguir 21 y 19 puntos, respectivamente. El resto de jugadores mantuvo el tipo y controló perfectamente sus reacciones ante un arbitraje más que dudoso. El joven Aisa estuvo en el sitio justo en el momento preciso y se convirtió en el héroe del partido.