La Fundación Pablo Iglesias impulsa una plataforma con todas las corrientes del PSOE

La Fundación Pablo Iglesias, un organismo cultural vinculado al PSOE, ha promovido una plataforma de debate en la que están representadas todas las corrientes ideológicas del socialismo. La pretensión de esta plataforma, la única que en estos momentos abarca toda la pluralidad existente en el PSOE, consiste en abastecer tanto al Gobierno como al partido de materiales teóricos sobre problemas como la reforma de los servicios públicos y el conflicto Norte-Sur. La plataforma cuenta con el apoyo del vicesecretario del PSOE, Alfonso Guerra, y del vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra.

La plataforma, cuya iniciativa procede del director adjunto de la Fundación Pablo Iglesias y ex coordinador del Programa 2000, Manuel Escudero, con el respaldo de su director, Ludolfo Paramio, reúne a socialistas procedentes del llamado clan de Chamartín, como los ex ministros Joaquín Almunia y José María Maravall; a Miguel Ángel Fernández Ordóñez, presidente de la Fundación de la Corporación Bancaria, vinculado al ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga; a militantes de la nueva plataforma de izquierda, como el ex ministro de Exteriores, Fernando Morán, y Antonio García Santesmases; a dirigentes del aparato socialista como Salvador Clotas y a Miguel Iceta, ex secretario de Formación del PSC-PSOE.El resto de los componentes de la nueva plataforma son Julio Rodríguez, presidente del Banco Hipotecario Español y teóricos socialistas como Elías Díaz, Miguel Ángel Quintanilla, Ramón Vargas Machuca y César Braña, que trabajaron en el Programa 2000.

Consenso a alto nivel

La iniciativa cuenta con el consenso del vicesecretario general del PSOE, Alfonso Guerra, y el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra. Éste último ha situado en la plataforma unitaria a uno de sus colaboradores más inmediatos, el citado Miguel Iceta. Guerra cuenta con un miembro del aparato del partido, Salvador Clotas, y es posible la incorporación de José Félix Tezanos, secretario de Formación de la Ejecutiva Federal socialista.

Esta plataforma unitaria pretende realizar "un trabajo útil para el Gobierno y partido", según sus promotores, que se va a materializar en primer lugar, "en una reflexión sobre el diseño de los servicios públicos", uno de los objetivos preferentes del Ejecutivo. Concretamente, la plataforma abordará la situación desde Correos y telecomunicaciones hasta los trámites administrativos como licencias y otros.

La segunda tarea que pretende abordar esta comisión es la situación Norte-Sur, con propuestas viables para el nuevo orden internacional, en materia económica, ecológica y, en tercer lugar, continuar con los estudios del futuro del socialismo. La plataforma materializará sus tareas a través de ciclos de debate, dirigidos por personalidades políticas.

Manuel Escudero señaló ayer que, además de las actividades, la plataforma pretende "crear un espacio de trabajo común en el que puedan coincidir militantes socialistas desde talantes diferentes".

La creación de esta nueva plataforma se produce en un momento intenso de alineamientos en el PSOE con el trasvase de militantes guerristas al felipismo, con un intento del ex vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, de recuperar posiciones en el partido -cuya muestra más expresiva es la batalla por el poder en la Federación Socialista Madrileña (FSM)- y el lanzamiento, hace quince días, de un organismo que trata de reagrupar a la izquierda del PSOE, como el Centro de Estudios Políticos y Sociales (CEPES).

Promotores de esta nueva plataforma opinan que todos esos movimientos son "una reafirmación de la pluralidad del PSOE" y diagnostican que la situación conflictiva actual por la que atraviesa el partido es "un reflejo de la necesidad de adecuar la pluralidad existente a la realidad. Eso es lo que está pasando ahora en el partido". En este sentido, opinan que el nuevo organismo unitario no entra en contradicción con otras iniciativas, como el CEPES. "No es una plataforma de poder. Es simplemente el reconocimiento de toda la pluralidad existente", añaden.

Importancia estratégica

El lanzamiento de este nuevo organismo unitario tiene desde esta perspectiva una importancia estratégica para los sectores renovadores del socialismo. En estos sectores se estima que, a lo largo del tiempo, se pueden multiplicar organismos de estas características y creen "prácticamente inevitable" que el proceso culmine con una democratización interna.

Los militantes renovadores más optimistas del PSOE creen que el proceso de reconocimiento de la pluralidad interna se producirá para el próximo congreso, dentro de dos años, con reforma incluida de los estatutos del partido. Según los mismos militantes, en el anterior congreso, celebrado en noviembre pasado, ya se produjo un reconocimiento implícito de las corrientes, en las negociaciones, pero no se tradujo en representación en la Ejecutiva.