Colapso circulatorio en los alrededores de los cementerios y las salidas de la ciudad

Madrid vivió ayer una de sus peores jornadas de tráfico, al coincidir la salida masiva de automovilistas con motivo del puente de Todos los Santos y la tradicional visita a familiares y amigos fallecidos en los principales cementerios de la ciudad. Los alrededores de los camposantos, especialmente en los de la Almudena y Carabanchel, la M-30, las calles que desembocan en la carretera de La Coruña (N-VI) y las autovías radiales estuvieron prácticamente bloqueadas desde primera hora de la mañana y hasta bien entrada la tarde.

No obstante, según los responsables de la operación salida, la intensidad del tráfico fue menor que la registrada el jueves por la noche, durante las primeras horas de la operación. Ese día, un tramo del paseo de la Castellana (entre la calle de Panamá y Cuzco) estuvo cortado 20 minutos ante la presencia de un maletín sospechoso olvidado junto a la puerta del Ministerio de Hacienda. La alarma cesó cuando apareció el propietario del portafolios comentando lo distraído que había sido.La Dirección General de Tráfico (DGT) no supo precisar qué carretera sufrió ayer mayores retenciones. "Todas han tenido dificultades", precisó un portavoz. Sin embargo, la Policía Municipal destacó la autovía de La Coruña como la más conflictiva. "Los accesos principales a la N-VI se han colapsado", informó su portavoz. La calle de la Princiesa se inundó de coches hasta la plaza de España, y en la M-30 el atasco matinal se prolongó desde el puente de los Franceses al estadio Vicente Calderón.

Carretera de Toledo

También la carretera de Toledo (N-401) sufrió retenciones de importancia al coincidir los automovilistas que partíciparon en el éxodo del puente con los que acudían al cementerio de Carabanchel. Los vehículos que intentaban acceder a esta necrópo lis también sufrieron retenciones en Santa María de la Cabeza y la glorieta Elíptica.A las tres de la tarde, los problemas se habían alejado de la capital, pero aún no habían salido de la región. Según informó la DGT, la carretera de Burgos (N-1) tenía en ese momento "retenciones esporádicas" entre los kilómetros 41 y 51 (a la altura de El Molar), la carretera de Extremadura (N-V) entre los kilómetros 6 y 26 (hasta las proximida des de Navalcarnero) y la de La Coruña, entre los puntos kilométricos 20 y 25. A las seis de la tarde, las retenciones en la carretera de Burgos se habían trasladado a Buitrago, todavía dentro de la comunidad.

En la ciudad, los mayores atascos se produjeron en los alrededores del cementerio de la Alumudena, el camposanto más grande de Madrid. Los accesos desde la M-30 (por la calle del Marqués de Corbera o la avenida de Daroca) se congestionaron, así como las entradas desde el norte, por la avenida de los Hermanos García Noblejas y la calle de Alcalá.

Durante la madrugada, dos personas murieron calcinadas en el paseo de Extremadura al colisionar su vehículo contra una farola e incendiarse el coche tras el accidente. Por la tarde, falleció un oficial del Cuerpo Nacional de Policía en la M-40 al salirse con su vehículo de la calzada.

... Continuará el domingo.