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Izquierda Unida y PSOE sólo aceptarán pactos puntuales

Anabel Díez

La dirección del PSOE ha decidido guard ar casi hasta el límite de tiempo sus intenciones respecto a la política de pactos con la expectativa de que sean Izquierda Unida, el. Partido Popular y los partidos regionaiistas quienes desvelen antes sus intenciones. Tanto el PSOE como Izquierda Unida (IU) no son partidarios de establecer pactos globales, sino acuerdos puntuales. En palabras del vicesecretario general, Alfonso Guerra, el PSOE no hablará jamás de "pacto global", sino de "pactos mixtos", Nicolás Sartorius, diputado de Izquierda Unida (IU), también se manifestó ayer favorable a acordar solamente pactos puntuales.En el PSOE la situación general es de moderada satisfacción, sólo turbada por el disgusto de haber perdido las elecciones municipales en Madrid y la posibilidad de que los ayuntamientos de Sevilla y Valencia sean gobernados por un pacto entre "la derecha nacional y la derecha regional". Lo cierto es que tan sólo en Madrid puede originarse alguna controversia interna, ya que en Sevilla y Valencia los socialistas llegaron a las elecciones unidos y sus listas resultaron las más votadas.

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En el caso de Sevilla, el esfuerzo ha sido generalizado, ya que tanto Felipe González como Alfonso Guerra han cuidado especialmente esta plaza. El secretario general de los socialistas andaluces, Carlos Sanjuán, señaló al término de la reunión que ayer mantuvo Alfonso Guerra con los secretarios regionales: "El PSOE ha ganado las elecciones en Sevilla sacando 11 puntos de distancia al siguiente partido. Ahora bien, si la derecha (PP-PA) pacta será su responsabilidad".

[El PSOE ha perdido en estas elecciones unos cinco mil votos en la capital sevillana. Fuentes socialistas atribuyen este descenso a la abstención, pero reconocen que en Sevilla, su ciudad símbolo, "se ha tratado mal a la gente" y que las inversiones millonarias han resultado insuficientes para ilusionar al electorado, informa Lourdes Lucio].

Palabras similares a las de Sanjuán, fueron pronunciadas por el futuro presidente de la coinunidad valenciana, Joan Lerma, respecto a la alcaldía de Valencia, donde la conjunción PP-Unión Valenciana puede desalojar a la socialista Clementina Ródenas, ya que el apoyo de Izquierda Unida aquí resultaría insuficiente.

En Madrid, el presidente Joaquín Leguina tiene asegurada su permanencia en el puesto con el apoyo de Izquierda Unida, mientras que su compañero Juan Barranco pasa definitivamente a la oposición ante la mayoría absoluta registrada por el PP.

De momento, los viejos demonios de la Federación Socialista Madrileña tan sólo han surgido en conversaciones informales respecto a la idoneidad de los candidatos para la alcaldía y la comunidad, si bien la dirección federal ha asurnido la derrota como algo inevitable y no se ha escuchado reproches hacia nadie. No obstante, ya se habla de emprender la tarea de buscar a nuevos candidatos para las próximas elecciones. Los socialistas concluyen que el PP ya tiene una estructura sólida en Madrid.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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