El congreso socialista navarro debate el respaldo a la política de Solchaga

El ministro de Economía, Carlos Solchaga, expresó ayer en Pamplona su esperanza de que los 208 delegados socialistas que asisten al IV Congreso del Partido Socialista de Navarra (PSN-PSOE) le elijan nuevamente para formar parte del Comité Federal del partido. La ponencia marco que el PSOE de Navarra debatirá este fin de semana corrobora la política económica de Solchaga, en la que se propugna la concertación social y los acuerdos entre las fuerzas navarras para la gobernabilidad de la región.

Solchaga manifestó que no tendrá un papel relevante en los debates del congreso, que, según dijo, se prevé tranquilo y sin sobresaltos. Encabezados por su secretario general y presidente del Gobierno navarro, Gabriel Urralburu, los socialistas pretenden alcanzar "un pacto social de progreso para Navarra", para lo cual serán convocadas todas las organizaciones económicas y sociales representativas de la región.Urralburu será reelegido con absoluta seguridad secretario general de los socialistas navarros, que se han destacado en su apoyo al ministro de Economía, el tafallés Carlos Solchaga, a quien eligieron el pasado mes de septiembre como delegado navarro ante el 321 congreso federal de los socialistas españoles en una lista que contó con el apoyo del 94% de los votos de la asamblea regional del PSN.

En aquella reunión, los socialistas navarros aprobaron una ponencia política en la que se reivindicaba, en línea con las tesis del ministro de Economía, una mayor apertura de los órganos de dirección del partido hacia las diferentes tendencias existentes en su seno.

Fórmulas flexibles

La ponencia destacaba "la necidad de encontrar fórmulas es flexibles e integradoras de las diversas sintonías políticas que han venido tomando cuerpo en nuestro partido", al tiempo que abogaba por apartar de las filas del PSOE a los militantes cuyos comportamientos, se decía, "no hayan sido compatibles con el sentido ético de la gestión pública" y pedía preservar el proyecto del Partido Socialista con independencia de la política del sindicato UGT.El presidente navarro Gabriel Urralburu ensalzó en su discurso el acuerdo por la paz y la tolerancia firmado por los partidos navarros en octubre de 1988, el cual, dijo, "se mantiene hoy con igual solidez". "Herri Batasuna acusó el golpe de la unidad de nuestro pueblo frente al terror", hecho al que atribuyó que esta formación en 1989 por primera vez redujo muy significativamente sus apoyos electorales". Urralburu manifestó que "negociar con los terroristas los asuntos políticos es ya una cuestión zanjada y definitivamente rechazada".