Biriukov clasificó al Madrid en el último segundo

El miércoles fue Winslow. Ayer, Biriukov. Dos eliminatorias, 80 minutos, decididos en dos lances casi idénticos. Estudiantes y Real Madrid eligieron la misma jugada para resolver sus compromisos. La gran diferencia entre ambos fue que, mientras el tiro del norteamericano no fue producto de un razonamiento táctico, el de Biriukov se convirtió en un destello de clarividencia de un equipo proclive a este tipo de acciones.El Estudiantes contó con 19 segundos para buscar una buena opción, que no encontró, o, mejor dicho, no supo encontrar. El Real Madrid sólo tuvo cinco, y quizá por ello contó con la decisión necesaria para hacer algo sencillo y directo. Llorente llevó rápidamente el balón a la zona de ataque, pasó a Biriukov e hizo algo más importante, bloqueó simultáneamente al defensor del alero moscovita y le dejó un tiro despejado, una visión diáfana del aro. Biriukov hizo honor a su origen, y su mano no tembló. El mismo lance y opuestas consecuencias.

El Real Madrid ganó a los puntos, cuando la suerte le volvió la espalda para poder hacerlo por KO en los primeros minutos del segundo tiempo. Hasta ese momento, el partido era más una batalla de voluntades que otra cosa. Los dos equipos derrochaban esfuerzo, dureza, y no excesivo acierto. La obsesión blanca, Gentile, mandaba al banquillo a su primer defensor, Cargol, y los siguientes de la lista, Biriukov y Villalobos, hacían lo que podían. Schackleford dominaba el rebote, y Martín mantenía el resultado igualado.

El descanso enfrió a los italianos hasta extremos insospechados, y ya no volverían a entrar en calor. Dieciocho puntos en el segundo tiempo son probablemente un récord negativo para estas alturas de la competición. En cinco minutos, el Real Madrid tuvo tocado al Phonola, pero el tercer torpedo de Biriukov erró, y su reacción le costó la cuarta falta y el banquillo. Tal vez lo estaba guardando para el instante supremo.

La salida del escolta madridista, unida a la lesión de Antonio Martín, puso al Madrid a la altura de los italianos. El partido se convirtió en un rosario de errores, y los dos equipos parecían aceptar el lanzamiento de moneda en forma de tiro final para decidir la eliminatoria. Dos errores arbitrales dieron y quitaron. Primero concedieron una importante posesión al Phonola a falta de menos de dos minutos, cuando había sido Frank el último en tocar el balón. El fallo fue compensado con creces al dejar el tiro definitivo al Real Madrid cuando Martín había lanzado el balón fuera.

Victoria del Barcelona

En la Copa de Europa, el Barcelona resolvió su partido en la temida pista del Aris Salónica con una contundencia tal (93-110) que desarmó el amplio muestrario de triquiñuelas, incorrecciones y violencia que utilizan los seguidores, y probablemente también algunos empleados, del club griego. El equipo azulgrana arrolló a su rival y obtuvo la victoria que precisaba para sumar las ocho que virtualmente le clasifican para las semifinales.

La conclusión del encuentro fue rocambolesca. El juego se suspendió cuando el resultado era 93-103, a falta de 1.35 minutos para el final, debido a que un apagón de luz que dejó el pabellón totalmente a oscuras fue aprovechado por el público para lanzar toda clase de objetos contra los árbitros y los jugadores del Barcelona. Los anotadores del Aris fueron: Yannakis (17), Gallis, (38), Lipiridis (7), Sellers (24) y Sobin (6). Por parte del Barcelona anotaron: Solozábal (18), Lisard (3), Esteller (1), Ortiz (32), Norris (17), Epl (21), Trumbo (8) y Galilea (10).

Por otra parte, se celebró ayer el sorteo para la fase final del Campeonato de Europa de selecciones, a disputar en Roma del 24 al 29 de Junio. España ha quedado encuadrada en el grupo A, junto a Yugoslavia, Bulgaria y Polonia. El otro grupo es: Grecia, Italia, Francia y Checoslovaquia.