Bernard Tapie denuncia a la UEFA la existencia de una presunta red de compra de árbitros

La Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA) está preocupada por la aparición de una presunta red de personas dedicadas a la compra de árbitros y al arreglo de partidos en los torneos que organiza. El presidente del Olímpico de Marsella, Bernard Tapie, denunció ayer la existencia de cuentas bancarias domiciliadas en Suiza y destinadas a pagar a determinados colegiados. El propio Tapie fue amonestado por el Comité de Control y Disciplina de la UEFA por sus acusaciones contra el que dirigió el partido Benfica-Marsella de las semifinales de la pasada Copa de Europa, en el que su equipo fue eliminado por un gol logrado con la mano.

Fuentes oficiosas de la UEFA aseguran que se ha abierto una investigación interna sobre todo este asunto, cuyas primeras consecuencias son que determinados funcionarios están siendo controlados y que algunos árbitros, sin que hayan trascendido sus nacionalidades, no han dirigido aún partidos de los torneos relativos a esta temporada.La Comisión de Control y Disciplina acordó amonestar a Tapie y advertir al Marsella por las acusaciones de su dirigente contra el árbitro belga Márcel van Langenhove.

Tapie, industrial francés que hace unos meses compró la empresa alemana de material deportivo Adidas, colaboradora de la UEFA y la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), explicó ayer ante los miembros del Comité de Control y Disciplina del máximo organismo futbolístico europeo las acusaciones que en mayo pasado dirigió contra Van Langenhove. Tapie aseguró entonces que el colegiado belga había sido comprado por el Benfica, que llegó a la final por un tanto de Vata con la mano.

Aclaraciones

El presidente del Marsella aclaró ayer que sus acusaciones no fueron dirigidas expresamente contra Van Langenhove y las generalizó al referirse a la existencia de una red de personas que se dedican al arreglo de partidos y a la compra de árbitros. Tapie presentó como testigo ante el comité, para apoyar sus declaraciones, al griego Spiros Karageorgis, un intermediario futbolístico que reside en Ginebra y que precisamente ha sido propuesto como "persona no grata" por dicho órgano.Tanto Tapie como Karageorgis declararon que se han limitado a aportar a la UEFA los datos que tienen sobre esa red de arreglo y compra de partidos. "La UEFA deberá investigar este asunto si quiere adoptar las medidas oportunas", afirmó el presidente del Marsella. Según el intermediario griego, antes de jugarse el partido Marsella-Berifica, una persona anónima se puso en contacto telefónico con él para indicarle que Van Langenhove iba a dirigir el encuentro de vuelta y que era tocable, como lo fueron antes otros colegiados que, presuntamente, recibieron sus recompensas económicas en ingresos en cuentas bancarias cifradas de Suiza. Tapie aportó fotocopias de las mismas, en las que sólo figuran unos números y las palabras POR y SPO, que se atribuyen a los equipos portugueses Porto (Oporto) y Sporting de Lisboa, junto con las cantidades de 90.000 y 85.000 francos suizos (unos siete y unos seis millones de pesetas, respectivamente).

Aparentemente, el comité, en su comunicado, da por cerrado este tema. Pero la UEFA continúa sus investigacioneshabiendo ordenado el pasado mes de septiembre a todas las federaciones, clubes y organizaciones arbitrales de Europa una serie de medidas estrictas entre las que destaca la prohibición de que los directivos acompañen a los colegiados antes de los partidos. Algunos clubes españoles las incumplen y hasta la UEFA ha llegado esta situación sin que por ahora haya adoptado acuerdo alguno al respecto.