Ya lo dijo Mark Twain

Fundamentalistas, cuantitativistas, oportunistas, seguidores, manipuladores, chartistas y contrarios, todo el elenco de la fauna bursátil hacía codos desde primeras horas de la mañana para ocupar la pole position en la parrilla de salida. La reacción espectacular de los grandes mercados anunciaba una sesión en espiral ascendente que con velocidad de vértigo iba a llevarse las cotizaciones hacia las nubes. Así fue, con una escalada de más de] 5% en términos absolutos y un incremento de los volúmenes contratados del 113%. Alrededor de 15.000 millones en el continuo es toda una supermarca. Las eléctricas subieron todas, los bancos siguieron el empujón y en algunos valores de alta liquidez se produjo tal avalancha de demandantes con relación al papel disponible que no empezaron a marcarse cambios hasta bien entrada la sesión. Muchos operadores se situaron a corto en los primeros compases para acabar adoptando posiciones estables en- los límites del cierre. En días como éste, la Bolsa es un juego de niños, sobre todo si se había entrado a precios de anteayer. Ya lo dijo Mark Twain: "Es fácil hacer dinero en Wall Street. Lo que hay que hacer es comprar cuando el precio esté bajo; en cuanto suba, vender y obtener beneficio".