Ballesteros se acentuó en Alabama
La crisis de Severiano Ballesteros acentuó el viernes con su eliminación tras la segunda vuelta del Campeonato de la Asociación Profesional (PGA) norteamericana, que se disputa en el intrincado campo de Shoal Creek (Birmingham, Alabama). Se trató del tercer corte fallado de manera consecutiva por el golfista español y del sexto a lo largo de la peor temporada de su carrera profesional, iniciada en 1974, cuando tenía 17 años. Ballesteros acumuló 160 golpes (77 y 83), 21 más que el líder, el australiano Wayne Grady. José María Olazábal, con 222 (73,77 y 72), mejoró algo su clasificación, pero no tiene opción alguna para luchar por el triunfo.
Algunos reaccionaron en la segunda jornada. El australiano Greg Norman, con 146 (77 y 69), y los estadounidenses Hale Irwin, con 149 (77 y 72), y Tom Kite, con 150 (79 y 7 l), pudieron mantenerse en la competición. Otros, como los también norteamericanos Jack Nick1aus y Lee Treviño, con 152; Mark Calcavecehia, con 154, y Curtis Strange y Lanny Wadkins, con 155; el alemán occidental Bernhard Langer, con 153; el norirlandés Ronan Rafferty, con 156, y el argentino Eduardo Romero y el australiano Rodger Davis, con 159, no lograron los 151 que permitían seguir en ella. Pero, de todos éstos, el más frustrado fue Ballesteros, que, con 160, quedó el 1302 entre los 149 jugadores que completaron los 36 primeros hoyos.Así, pues, la crisis del cántabro se acentuó en la última cita del Grand Slam. El Campeonato de la PGA supuso su tercer fracaso sucesivo, ya que también fue eliminado en el Open Británico, hace tres semanas, y en el torneo de Memphis (Tennessee), hace una. Con anterioridad lo había sido en los de Orlando (Florida), Madrid y Potomac (Maryland). El campo de Shoal Creek, en el que el rough es temible por la arboleda, se constituyó en una auténtica pesadilla para él ahora que sus lanzamientos largos se desvían bastante. En realidad, terminó tan descentrado que presentó una de sus peores tarjetas, 83 (once sobre par).
No fue el único, eso sí, en perder el control. Incluso el inglés Nick Faldo, más en forma que nadie en la actualidad y aspirante a igualar al estadounidense Ben Hogan como ganador de tres grandes en un mismo año, luego de haberse anotado el Masters de Augusta (Georgia), en abril, y el Británico, en julio, se calentó ante las dificultades del terreno y, con 146 (71 y 75), vio disminuidas sus posibilidades: "Hubo veces en que no sabía hacia dónde dirigir la pelota".
Grady, con 139 (72 y 67), sí que atinó el viernes y se colocó como líder. Ayer fue adelantado por Gil Morgan, que ayer logró 65 golpes, siete bajo par y se ha colocado con un total de 214. A continuación iba el local Larry Mize, con un golpe más.
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