Un testigo dice que Antonió Guerra pidió dinero para un soborno
Víctor Renedo, que deberá comparecer mañana como testigo ante el juez de Sevilla Ángel Márquez, que instruye el llamado caso Juan Guerra, asegura que Antonio Guerra, hermano del vicepresidente del Gobierno, y su socio Francisco Medina Vadillo "pidieron a Manuel Macías" propietario de la inmobiliaria madrileña Cimsa, "dos millones de pesetas" esgrimiendo que "eran para sobornar a dos altos cargos del Ministerio de Defensa". Previamente, Macías les habría entregado otros tres millones, según Renedo.
El dinero se entregó a cambio de unas gestiones tendentes a conseguir para Cimsa los terrenos sobre los que se ubican los cuarteles de La Maestranza, que eran propiedad del Ministerio de Defensa, según afirma Renedo.Renedo, que entregó el pasado sábado en la comisaría del barrio madrileño de Campamento documentación relativa a la investigación, certifica que Manuel Macías "ofreció un premio de 500 millones de pesetas a Antonio Guerra y a Medina Vadillo" si conseguían para Cimsa la adjudicación de esos cuarteles, ubicados en Madrid. Sin embargo, esta operación nunca llegó a materializarse.
Renedo, que aseguró ayer a EL PAÍS que desconoce siparte de los 500 millones del citado premio iban a ser destinados al PSOE-"ni lo sé ni lo he visto", dijo- se personó en la comisaría de Campamento después de recibir varias llamadas telefónicas, una de ellas del propio Manuel Macías. "Supongo que con la intención de comprar mi silencio, aunque a mi no me compra nadie, por eso fui a la policía", señaló Renedo. Y añadió: "Yo sólo he trabajado para Cimsa, en calidad de asesor de marketing, en dos circunstancias: para la promoción de unos pisos de lujo en el barrio del Niño Jesús, de Madrid, que fue un éxito para Cimsa, y en lo de La Maestranza.
Medina Vadillo tiene declarado ante el juez Márquez que él y Antonio Guerra estuvieronen la Moncloa en 1988 para informar al vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, de un premio de 500 millones que ofrecía Macías por conseguir los citados cuarteles militares. Según Medina Vadillo, 300 de estos millones irían al PSOE y los 200 restantes se los repartirían ellos.
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