Uno de los asesinos de Popieluszko implicó al entonces ministro del Interior

Grzegorz Piotrowski, policía encarcelado por el asesinato, en 1984, del sacerdote próximo a Solidaridad Jerzy Popieluszko, escribió en 1986 al entonces ministro del Interior polaco, general Czeslaw Kiszczak, para decirle que actuó en cumplimiento de su deber, según el diario de Solidaridad Gazeta Wyborcza, "Nuestra acción, señor", se decía en el texto, "no fue un acto de extrema ilegalidad, sino un acto de devoción y subordinación al servicio. Y usted lo sabe".La frase parece implicar que Piotrowski y otros tres policías actuaron siguiendo órdenes superiores cuando mataron a Popieluszko, cuyo cuerpo fue extraído del río Vistula con claros signos de tortura.

Kiszczak cesó como ministro hace una semana, tras haber ocupado el cargo desde 1981. El actual Gobierno aseguró el mes pasado que iba a reabrir la investigación sobre el asesinato, porque había muchas cuestiones que permanecían confusas.