El Parlamento lituano aplaza la votación sobre la moratoria del acta de independencia

ENVIADO ESPECIALEl Parlamento de Lituania aplazó anoche hasta el jueves la votación de la propuesta del Gobierno de esta República báltica de declarar una moratoria del acta de independencia. Durante la sesión, el presidente del Parlamento Vitautas Landsbergis informó a los diputados de su entrevista con el líder soviético. Mijaíl Gorbachov, calificándola de "clarificadora". Según Landsbergis, el presidente de la URSS, acusó a los lituanos, de "ir a la suya, sin prestar atención" a lo que sucede en el Estado.

Gorbachov parece jugar con las diferencias existentes entre Landsbergis y, la primera ministra de de Lituania. Kazimiere Prunskiene, quien pone todo su empeño para conseguir la suspensión del acta de independencia aprobada el 11 de marzo.

Como condición previa a cualquier tipo de conversaciones, Gorbachov sigue exigiendo declarar una moratoria al acta de independencia y volver a la situación existente el 10 de marzo. "Esto no nos alegró, pues teniamos la esperanza de que su posición fuera más elastica", declaro Landshergis.

Lo curioso es que dos horas después de terminada la reunión con Landsbergis, el presidente de la URSS, telefoneó Prunskiene, mostrándose con ella mucho más flexible. Según la primera ministra, Gorbachov no habló de volver al 10 de marzo y aseguró que coincidía con ella en la interpretación de la moratoria. Para la jefa del Gobierno lituano, la moratoria no significa una derogación, sino simplemente no utilizar los derechos que se desprenden del acta de independencia.

"En mi opinión para afianzar nuestra independencia debemos ponernos de acuerdo con la Unión Soviética. Los países occidentales nos han dicho claramente que el reconocimiento de Lituania será efectivo sólo si nos ponemos de acuerdo con Moscú", afirmó Prunskiene, que representa el ala más moderada de la cúpula dirigente báltica.

"¿Hay otra manera de solucionar el problema del bIoqueo, del Ejército y las fronteras que no sea congelando el acta de independencia?", preguntó la primera ministra. "Nosotros no vemos otro camino. Necesitamos negociar. No tenemos una varita mágica para solucionar el problema. Si otro gobierno cree tenerla, por favor ..." declaró Prunskiene insinuando que estaba díspuesta a dimitir si no se concluya el acta de independencia.