REGATES
Hungría perdió en Berna ante la RFA (3-2) la final del Mundial de 1954. Kocsis jugó en aquél partido. Dos años más tarde, volvió a caer en el mismo escenario, esta vez vestido de azulgrana, en la final de la Copa de Europa ante el Benfica de Lisboa (3-2). Kocsis declaró aquel día en el diario francés L'Equipe:Hoy he comprendido qué ocurrió en el partido ante Alemania: en este césped pesa una maldición extraña contra todo húngaro que lo pise.
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