Esperando a los Magos

La primera sesión bursátil del año en el parqué madrileño se tiñó de sopor. Faltaron habituales y, se resintió el volumen de negocio. La dinámica festiva, cierta debilidad el fondo y unas gotas de incertidumbre bastaron para aburrir a los presentes. Sólo las pantallas del continuo animaron la jornada con operaciones sobre acciones de sociedades como Fecsa, Unión Fenosa, Sniace e Iberduero, de las que se intercambiaron a través de pantalla 75.000, 150.000, 98.000 y más de 400.000 títulos, respectivamente. El mercado continuo situó el índice general cerca de dos puntos y medio por encima de la jornada precedente.Predomina la cautela y nadie olvida que vivimos fechas en las que se trabaja para la galería. El efecto maquillaje no impidió que los sectores bancario y de inversión cerraran con bajas. El resto de los sectores, y en especial el de comunicaciones, estrenaron año con subidas.

El descuento de dividendo por parte de 25 sociedades difuminó aún más la realidad. La suspensión de la negociación de la sociedad Financiera y Minera a consecuencia del lanzamiento de una OPA sobre el 10% de su capital por parte de la empresa gala Ciments Françaises, fue un motivo de conversación, aderezada por comentarios en torno a la publicación de una operación de compra sobre el 3,07% de Valenciana de Cementos por importe de 6.050 millones de pesetas. La operación responde a la reestructuración, en el grupo de empresas de Banesto, del accionariado de la cementera.