El Bilbao ofrece un nuevo reparto del poder en la cúpula del BBV

Los problemas climatológicos impidieron que la reunión del comité de crisis del Banco Bilbao Vizcaya (BBV) prevista inicialmente para primeras horas de la tarde de ayer se llevará a cabo en ese momento y que se retrasara hasta las primeras horas de la noche. A la reunión, los representantes del antiguo Banco de Bilbao llevaron una propuesta de copresidencia hasta la celebración de la próxima junta general de accionistas, a celebrar el último día del mes de febrero de 1990, a cambio de que se aceptara como principio "el adelantamiento de la constitución de una presidencia única y la creación de una vicepresidencia con responsabilidades operativas", según señalaron fuentes cercanas.La propuesta incluye que José Angel Sánchez Asiaín sea el presidente único de la entidad al término de este proceso de interinidad que se propone, y que Alfredo Sáenz ocupe el cargo de vicepresidente con poderes reforzados. Esta sería la fórmula propuesta para buscar una salida a la crisis desatada por el fallecimiento de Pedro Toledo. Fuentes del antiguo Banco de Vizcaya señalaban ayer que, en cualquier caso, la copresidencia era un tema innegociable y que "además es necesario en un momento en el que se necesita crear una cultura para un único banco que aún no existe". Además se propondría la creación de dos vicepresidencias de apoyo y de dos consejeros delegados.

El reparto del poder interno en el Banco Bilbao Vizcaya propuesto por los antiguos consejeros del Banco de Bilbao supone que Sánchez Asiaín mantendría el control sobre la planificación estratégica de la entidad, los temas de personal, el control interno y la contabilidad, mientras que Alfredo Sáenz se haría cargo de las unidades de negocio del banco.

Reequilibrios

Ello representa reequilibrar el poder interno dentro del banco de forma que Alfredo Sáenz controlaría cerca del 80% del banco y que José Ángel Sánchez Asiaín mantendría un control sobre el largo plazo muy distanciado del quehacer diario.Algunos de los miembros del comité de crisis del BBV tenían previsto viajar desde Madrid a Bilbao por carretera para asistir a la reunión, pero las condiciones de las carreteras por el temporal que afecta a las dos mesetas impidió este viaje por lo que tuvieron que volver a Madrid para intentar llegar a Bilbao por vía aérea. Por ello la reunión fue retrasada.

En los últimos días no se han producido reuniones formales del comité de crisis aunque los contactos entre las dos partes, por separado y conjuntamente, se han mantenido. La reunión de ayer duró dos horas y tras la propuesta del Bilbao se decidió proseguir las discusiones en una nueva reunión que se celebrará durante la mañana de hoy.