El Desafío España a la Copa América decide la inmediata construcción del primer barco

El Desafío España a la Copa América de 1992, una de las aventuras más importantes del deporte español en toda su historia, después de los Juegos Olímpicos de Barcelona, decidió ayer, tras reunirse su consejo asesor, la construcción inmediata del primer barco en Palma. El presupuesto roza los 400 millones de pesetas y se intenta que el patrocinio sea oficial inicialmente para mantener sólo el nombre de España.

El proyecto se encuentra en la fase más difícil, después de la primera aportación personal de 50 millones por parte de algunos socios. La cuestión económica, hasta que el barco esté en el agua parece la única clave Una vez superado el momento crítico actual se considera que todo irá rodado El Desafio no quiere implicar ahora a los grandes patrocinadore privados que serían un máximo de tres, pero se quiere sólo uno hasta la tercera fase, donde el presupuesto se disparará ya hasta los 3000 millones en recursos, más que en dinero. Tanto el Consejo Superior de Deportes como la Expo del 92 son los primeros en llamados a poyar el proyecto , para el que se soliclillara la exención Fiscal.En cualquier caso la seriedad del proyecto y la entidad de los implicados, que pueden recabar ayudas desde distintos puntos, ya ha sido valorada por la Asociaión Internacional que tutela el proceso de la Copa América. El proyecto español ha sido el último presentado de los 15 pertenecientes a 11 países y aceptados por el norteamericano San Diego Yacht Club, tarribién último ganador en el agua y en los juzgados ante el neozelandés Mercury Bay Boating Club. Sin embargo, el próximo barco llevará ya en su vela España 5, sólo tras Italia 1, Francia 2, Japón 3 y Dinamarca 4. Antes que Australia, Inglaterra, RFA, Escocia, Canadá y Suecia.

El Desafío España tendrá la importante intervención de los ganadores de medallas olímpicas en vela lígera que no entren en la próxima hornada para Barcelona 92, pues ambas preparaciones son incompatibles. Pero una de las razones fundamentales de que el proyecto haya ido adelante, además de los retos tecnológico, deportivo y de: tradición marinera, ha sido el nuevo tipo de barco Copa América, equivalente a un maxi, como los muchos españoles que en los últimos tiempos están consiguiendo grandes resultados.Con los antiguos 12 metros el retraso respecto a otros países hubiera hecho imposible el desafío.