Anguita afirma que el jefe del Ejecutivo vuelve a utilizar la táctica del "miedo"

Julio Anguita calificó ayer en Sevilla de "amenazante, crispante e hiriente" el discurso de los últimos días de Felipe González. Y añadió que no le consiente "ni una sola amenaza. Hay que acabar con esa práctica siniestra y encanallada de amenaza a un pueblo".En una conferencia de Prensa anterior al mitin, el candidato de Izquierda Unida (IU) no descartó la posibilidad de que Felipe González, "que tiene muy buenas dotes de actor", dijo, recurra de nuevo a la táctica empleada en la campaña del referéndum sobre la OTAN. "Esa táctica se basa", dijo Anguita, en una insinuación de amenaza". "Es un discurso de lo inerte, que no hace más que autoproclamarse como estabilidad y seguridad, anclándose en el miedo".

El candidato de IU añadió posteriormente en el mitin que un discurso de Estado no puede sustentarse en la amenaza, que hay que aceptar lo que diga el pueblo y que gobernar en minoría obliga al dialogo y a la concertación. Y que la estabilidad que el presidente del Gobierno pide no está en la mayoría absoluta, sino en la capacidad de diálogo con los demás.

A pesar de la cautela de Julio Anguita y del resto de dirigentes de IU a la hora de hacer pronósticos electorales, lo cierto es que en los últimos días, especialmente después de conocer los resultados de los sondeos de intención de voto, el candidato de IU a duras penas disimula en sus apariciones en público una clara sensación de optimismo, que va acrecentándose a medida que se suceden los últimos golpes electorales de la coalición Izquierda Unida.

La ofensiva final de IU comenzó el pasado sábado en Valencia, donde Anguita pidió por primera vez de forma directa y expresa el voto a los militantes del PSOE.

La oportunidad de esta estrategia fue confirmada al día siguiente por los resultados de las encuestas y reforzada el pasado martes con la asistencia del histórico socialista Luis Gómez Llorente a un mitin de IU en Alcalá de Henares. Esta operación continuó su desarrollo el miércoles en Cádiz, con el abandono del Partido Socialista y posterior ingreso en Izquierda Unida del ex presidente de la diputación gaditana, Gervasio Hernández Palomeque, y ayer en Barcelona, donde un centenar de militantes del PSC-PSOE anunciaron públicamente el abandono de las filas del partido socialista.

La lucha electoral de Izquierda Unida se centra en estos últimos días, además de en intentar acaparar el numeroso contingente de votos indecisos entre socialista e IU, en luchar contra Ia abstención.