Gaspart rechaza el soborno y la violencia ante el Anderlecht

EL PAÍS Joan Gaspart, vicepresidente del Fútbol Club Barcelona, aseguró ayer a este periódico que la frase pronunciada en el aeropuerto de Bruselas (ver EL PAÍS de ayer) después de que el conjunto azulgrana perdiera (2-0) en partido de ida de la Recopa de Europa de fútbol -"ganaremos aunque tengamos que comprar al árbitro o romper alguna pierna", dijo Gaspart- "se produjo en una charla informal entre amigos y está sacada fuera de contexto". Gaspart declaró que rechaza el soborno y la violencia como fórmula para superar los partidos y las eliminatorias europeas.

Gaspart, que no negó haber pronunciado esa frase, matizó: "Deseo señalar ante todo que no creo que para ganar al Anderlecht tengamos que comprar al árbitro o romper algunas piernas".

"En una charla informal con unos amigos en el aeropuerto de Bruselas hablamos de: diversos temas", siguió declarando el vicepresidente azulgrana, "todos ellos intrascendentes, y entre ellos las formas en las que se podría ganar al Anderlecht en el partido de vuelta, sobre todo a base de entrega del equipo y apoyo incondicional del público, palabras que de forma parcial, fuera de contexto y con gran sorpresa mía son reproducidas por EL PAÍS".

Gaspart pidió disculpas "a todos aquellos que hayan podido pensar que en verdad ése era mi pensamiento, máxime cuando tanto el soborno como la violencia son actitudes que rechazo frontalmente y que nada tienen que ver con mi forma de ser".

Josep Lluís Núñez, presidente azulgrana, también hizo ayer referencia a la frase pronunciada por Gaspart, pero trató de desviar la atención sobre el tema. Núñez, que tampoco negó que su vicepresidente pronunciara la frase, declaró en la inaguración de nuevos campos en ei entorno del Camp Nou: "Hay prensa que prefiere publicar los comentarios que realizó un directivo en una charla informal entre amigos, y como aficionado, que la grave lesión que sufre un jugador del Real Madrid. Veo que hay bula para según quien".

Núñez, contra el aumento

Por otra parte, Núñez rompió ayer unilateralmente las negociaciones con los jugadores en relación a las primas que deben percibir esta temporada. "No se trata de discutir nada", afirmó Núñez, "porque el club ya está pagando el máximo de lo que puede ofrecer, un aumento del 7% sobre los ingresos reales del año anterior, y al jugador que no le guste lo que debe hacer es buscarse otro equipo que le pague más que el Barça. Las declaraciones del presidente provocaron la indignación de los jugadores, que anunciaron la celebración de una reunión para estudiar posibles medidas a tomar, dado que, para ellos, las negociaciones no están cerradas".

El Barcelona, por su parte, jugará hoy en Atocha (20.00 horas TVE-2) con un equipo en el que estarán ausentes sus dos mejores delanteros, Julio Salinas, lesionado en Bruselas, y el danés Michael Laudrup, afectado de anginas. Cruyff ha prescindido de Soler, que había realizado unas duras declaraciones contra el técnico holandés asegurando que las listas se hacían "por sorteo o votación". "Podría decir, irónicamente", respondió ayer Cruyff, "que Soler no ha entrado en el bombo, pero esa no es la cuestión por la que no va convocado, sino que se trata de razones tácticas". Las novedades de la convocatoria son la presencia de López Rekarte y Valverde, que en San Sebastián podrían disputar su primer partido oficial de la temporada. De ser así Valverde perdería toda posibilidad de ser traspasado a otro equipo.