Johnson, Aquirre y Thomas, tres amigos inseparables

Magic Johnson, Isiah Thomas y Mark Aguirre son inseparables. Se hablan por teléfono durante largas horas, se van de fiesta juntos, se besan en público. Sólo son besitos en el carrillo, pero es un rito que realizan antes de cada partido en medio de la cancha, frente a millones de telespectadores. Verdaderamente se quieren y siempre celebran los éxitos. No importa el desenlace de esta final de la NBA: habrá alegría. Como dice Johnson, "uno de nosotros, y a lo mejor dos, va a ser campeón".

Son amigos desde pequeños. Aguirre y Thomas, compañeros de equipo en los Detroit Pistons, se conocieron en los barrios de Chicago, en la zona occidental, donde todavía reina la pobreza y el crimen. La madre de Thomas es famosa por haberse enfrentado a un maleante con una escopeta y hacer que se largara. Johnson viene de un ambiente más sano y cómodo. Es hijo de padres obreros que residen en Lansing (Michigan). Aguirre y él se conocieron jugando al baloncesto, y fue Aguirre quien presentó a Johnson y Thomas."Me llevó a Lansing", dice Thomas. "Yo pregunté, ¿donde está Lansing? ¿Juegan al baloncesto en ese pueblo?". Johnson, que cumple 30 años el 14 de agosto, es el más viejo. Aguirre tiene 29, y Thomas, 28. Johnson también es el que tiene mayor palmarés. Ganó el campeonato nacional universitario en 1979 cuando estudiaba en Michigan State, y lleva cinco títulos con los Lakers de Los Ángeles. El quinto vino a costa de Thomas, el año pasado, cuando los Lakers vencieron a los Pistons en siete partidos.

"Él quiere una sortija de campeón para cada uno de sus dedos", afirma Aguirre. "Ellos dicen que dejarán de visitarme porque no dejo de hablar sobre qué bien sienta ser un campeón", dice Jolinson en tono jocoso.

Johnson es quien pone el ejemplo. Los tres son estrellas auténticas, pero él es la figura nacional, el hombre de la sonrisa amplia y la facha de artista de Hollywood. Thomas dice que los Pistons aventajan a los Lakers en la final de este año gracias a lo que ha aprendido de Johnson. "Él conoce cómo prepararse y qué hacer", dice Thomas. "Una final no se gana sólo con el talento. Se necesita cabeza. Los dos equipos son muy hábiles. La victoria se decidirá por el que solucione el esquema de juego del otro".

Aguirre y Thomas se parecen más. Son sensibles, y cuando están de mal humor baja su rendimiento. Aguirre se fue de los Dallas Mavericks como una bolsa de basura a mitad de temporada cuando lo trasparason a Detroit por Adrian Dantley. Fue una transacción controvertida, porque mientras Aguirre es más joven y hábil que Dantley, también es más complicado y difícil. La madre de Dantley acusó a Thomas de maquiavélico, y aseguró que su hijo sufrió por la amistad entre Thomas y Aguirre. Como fuera el caso, los Pistons mejoraron con Aguirre, ganando 31 de los últimos 37 partidos, tras sumar 63 victorias en la temporada regular y encabezar las tablas de clasificación.

Aguirre ha madurado con los Pistons y ha demostrado que es capaz de jugar en equipo. Su rendimiento ha bajado de 22 puntos por partido a 14, y frecuentemente no se encuentra en la cancha durante momentos decisivos, pero no se queja. Thomas actúa como hermano ,mayor y ha conseguido que se acople con facilidad.

"Lo mejor de nuestra amistad es que es completamente sincera", dice Aguirre. "Nos lo decimos todo, sea malo o bueno. Nuestra amistad siempre será así". Thomas dice que una ventaja de tener como compañero a Aguirre es que puede hablar con él en el momento. "Lo mejor de esto es que nuestras cuentas de teléfono ya no son tan caras", asegura Thomas.