Sueño despierto
Acogiéndonos al derecho de réplica deseamos contestar al artículo de Alberto Iniesta publicado el 14 de septiembre pasado, sobre todo a su sentido de asamblea, ya que dice: "Y sueño despierto pensando que aquella asamblea conjunta de obispos y presbíteros pudiese tener ahora su continuación en otra más conjunta todavía en la que nos reuniéramos obispos, presbíteros y también representantes de los laicos" (sic).Poco ha faltado para que Iniesta especificase que esos representantes fueran laicos bien domados. ¿Acaso no estaría más de acuerdo con la idea cristiana de ministerio (que no es otra que la de servicio) decir: "Aquella asamblea debería tener ahora su continuación en otra más conjunta todavía en la que se reunieran laicos y también representantes de los diáconos, presbíteros y obispos? ¿Por qué? Por tres razones.
1. Porque las situaciones en que vive el hombre de hoy reclaman una agilidad hermenéutica de la que difícilmente pueden estar dotadas aquellas personas que coronaron ya metas de edades provectas y que por su formación se sienten interesadamente comprometidas con estilos y modos apenas ya en uso. Es decir, porque no se trata ya sólo de que estos obispos no sean jóvenes somáticamente, sino que lo penoso es que no lo son ni psíquica ni pneumáticamente.
2. Porque pasando la fe por la cabeza -cosa conveniente- ¿ustedes creen que el seguimiento ministerial de Jesucristo tiene algo que ver con la estola, el alba, la casulla, la dalmática, el solideo, la mitra, el báculo, el anillo y otras pamplinas vetustas (por hablar sólo de la indumentaria) que poco margen deja al siempre joven modelo de la buena noticia?
3. Porque si bien hay que admitir que lo que el historiador del derecho U. Stutz afirmaba en 1918 ("La Iglesia católica es la Iglesia del clero. Los laicos aparecen como meros pupilos, y sólo los clérigos como miembros con pleno derecho") se puede seguir afirmando en 1988, lo cierto es que somos muchos los laicos que ya no estamos dispuestos a ser domados por el clero ni a dejarnos arrastrar por una ordenación del hombre, de la sociedad y del cosmos más cercana a Platón y Aristóteles que a Jesús, el crucificado y resucitado.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.