Cosquilleo interior

Atención a esta nueva obra maestra de Lubitsch: no lo parece. Está entonada en voz baja, es frágil, suave, levemente dulzona y sus atributos cómicos no conducen a efecto carcajeante alguno, aunque sí a ese cosquilleo interior que reconforta el espíritu. Sus detractores la emparentan con el cine de Capra, lo que también puede verse como una memez: uno tiene a Capra por un -otro- maestro de la comedia. Del cine.El bazar de las sorpresas (The shop around the corner, 1940) se basa en una pieza de Nikolas Laszlo y trata de las humildes gentes que pueblan una marroquinería húngara, desde el dueño, los empleados y la mujer del dueño hasta el encargado y una dependienta nueva; entre estos dos últimos -James Stewart y Margaret Sullivan-, Lubitsch pone sus dotes de maestro de la observación y trenza la consabida reflexión sobre la batalla de los sexos a partir de dos singulares premisas: una, las cartas de amor que ambos escriben sin conocer sus respectivas identidades; la otra, una caja de música que para cada uno de ellos tendrá una filosofía muy particular.

El bazar de las sorpresas es una crónica costumbrista que evidencia la gran capacidad de Lubitsch para crear humanidad a partir de unos personajes que jamás son lo que aparentan.

El bazar de las sorpresas se emite, a las 21.20, por TVE-2.